Los aspirantes a una candidatura del PRI deberán pasar exámenes no sólo para acreditar conocimientos de los documentos básicos del partido, sino hacer otra prueba escrita, de opción múltiple, relacionada con el puesto al que pretenden acceder.

El tricolor busca cerrar el paso a la improvisación y a los gobernantes incompetentes, señaló Paul Ospital, presidente del Instituto de Capacitación y Desarrollo Político (Icadep) del partido, responsable de la elaboración y actualización de la batería de exámenes para aspirantes a un cargo de elección popular.

Este mes, el PRI emitirá las convocatorias, las cuales contendrán los requisitos para cada nombramiento, tanto para militantes como para ciudadanos o externos (no militantes).

El artículo 181 de los estatutos detalla los requisitos que deberán cumplir los afiliados, mientras los procedimientos para simpatizantes serán detallados por una cúpula partidista (comisión política permanente). Sin embargo, se deberá tomar en cuenta una base: aquel personaje externo que tenga potencial de ganar y se comprometa con el cumplimiento de los principios y el programa de acción priísta.

Las convocatorias, las cuales se conocerán a finales del mes en curso, incluirán, de manera muy particular, lo que se pedirá exclusivamente para el potencial abanderado a la Presidencia de la República, ya sea militante o externo.

En la asamblea nacional del PRI, realizada en agosto, se aprobaron los requisitos generales para aspirantes, entre los que se incluye la presentación de la declaración 3 de 3 (informe patrimonial, de intereses y fiscal); igualmente, quienes se registren como posibles candidatos deberán pasar varias fases previas antes de obtener una postulación.

Adicionalmente, el Revolucionario Institucional deberá tener en cuenta la cuota de género (50 por ciento para mujeres) y una de cada tres candidaturas para jóvenes (menores de 35 años de edad).

Además del examen de los documentos básicos del tricolor (estatutos, normas, historia, principios, programa de acción), los interesados deberán pasar el de áreas de conocimiento.

Vamos a aplicar una prueba para quien quiere ser, por ejemplo, regidor o presidente municipal, sobre reglamentos y urbanismo. Para diputados y senadores les haremos una sobre conocimiento del sistema legislativo mexicano, para evitar que lleguen improvisados, explicó Ospital.

Los exámenes de opción múltiple, precisó, serán calificados con un lector óptico. La calificación mínima aprobatoria de esta fase previa obligatoria no será seis, sino determinado número de aciertos que determinará el partido, según el puesto a contender y acorde con los requisitos de las convocatorias.

El objetivo es mandar a nuestros mejores candidatos no sólo para ganar elecciones, sino para que hagan una buena labor en el gobierno, dijo en entrevista.