Cada candidato a la Presidencia de la República de partido tendrá un tope de gastos de campaña de 429 millones 633 mil pesos, y de precampaña, de 67.2 millones de pesos para las elecciones de 2018, según el anteproyecto que la Comisión de Prerrogativas votará hoy.

Sin considerar el impacto inflacionario, esto implica que los candidatos presidenciales podrán gastar 21 por ciento más, en relación con 2012, cuando el límite fue de 336.1 millones.

Mientras tanto, cada candidato a diputado podrá erogar un millón 432 mil pesos, 21 por ciento más que el millón 120 mil pesos permitido hace seis años, de acuerdo con el referido documento.

Para cada precandidato a la Cámara de Diputados la inversión máxima podrá ser de 252 mil pesos.

Los límites para cada aspirante a senador varían según la entidad a la que correspondan: Veracruz, Ciudad de México y estado de México, 28 millones 642 mil pesos, y el monto menor es de 2 millones 864 mil pesos para Baja California Sur, Campeche y Colima.

En 2012 el límite de gasto permitido para los aspirantes al Senado fue de 22 millones 407 mil pesos y el más bajo ascendió a 2 millones 247 mil pesos.

La inversión máxima en las precampañas de senadores podrá ser de 4 millones 481 mil pesos en Veracruz, y la mínima de 448 mil 149 pesos.

Se espera que dichas cifras no sean modificadas por los consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE), dado que se basan en fórmulas establecidas por la Constitución.

El tope máximo de gastos de la campaña presidencial será equivalente a 20 por ciento del financiamiento público establecido para todos los partidos en el año de la elección presidencial, que será de 2 mil 148 millones de pesos.

Para la elección de diputados por el principio de mayoría resulta de dividir el tope de gasto de campaña establecido para la elección presidencial entre 300.

La cantidad máxima que puede obtener cada fórmula al Senado se obtiene de multiplicar la suma del tope de gasto de campaña para la elección de diputados por el número de distritos que comprenda la entidad de que se trate.

Las cifras para cada una de las precandidaturas representan 20 por ciento del gasto de campaña de los candidatos a la Presidencia, a las cámaras de Diputados y Senadores, respectivamente.

En caso de incumplir estos topes los contendientes pueden recibir sanciones severas. A los partidos políticos es posible aplicarles multas equivalentes al monto ejercido en exceso y si los candidatos llegan a quedar en primer lugar con una diferencia inferior a 5 por ciento y gastar 5 por ciento o más de lo permitido, se puede anular su triunfo.

De igual forma, los precandidatos que superen los topes mencionados serán sancionados con la cancelación de su registro o, en su caso, con la pérdida de la candidatura que hayan obtenido, aunque los partidos políticos conservarán el derecho de realizar las sustituciones que procedan.