Ante un escenario en el cual las fuerzas armadas cada vez participan más en operativos de seguridad pública, es indispensable asegurarse de que éstos se lleven a cabo respetando las garantías básicas de la población y considerando siempre el uso proporcional de la fuerza.

Así lo afirmó el presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Peter Maurer, quien señaló que algunas de las mayores preocupaciones del organismo humanitario con respecto al país, son las agresiones contra migrantes indocumentados y la necesidad de poner en marcha la Ley General en Materia de Desaparición Forzada.

Luego de concluir una visita al país, del 17 al 20 de octubre –durante el cual visitó la Ciudad de México y Tamaulipas, y se reunió con funcionarios y organizaciones de la sociedad civil–, el funcionario destacó que la presencia de militares en labores policiacas requiere de una vigilancia cercana para evitar posibles violaciones a los derechos humanos.

Ciertamente no es la situación ideal, pero el hecho es que está pasando, y si las fuerzas armadas reciben el mandato de participar en temas de seguridad pública, necesitamos asegurarnos de que el uso de la fuerza está ocurriendo en el marco de la ley y se está protegiendo la gente, enfatizó Maurer en entrevista.

La idea de las leyes humanitarias internacionales siempre es encontrar un balance entre sguridad y protección. Estamos felices de estar involucrados en el diálogo confidencial que tenemos con el Ejército, y puedo decir que hoy encontramos mucho más interés y respuesta positiva en este diálogo con las fuerzas armadas mexicanas, añadió.

Peter Maurer, presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja, en el contexto de la entrevista de ayer con La Jornada Foto Yazmín Ortega Cortés

Cuestionado sobre la pertinencia de utilizar al Ejército en tareas de seguridad pública, el director del CICR subrayó: El rol de las fuerzas armadas es un tema político en el cual no nos expresamos. Lo que sabemos es que está pasando y tiene que ocurrir dentro de un marco legal y seguir protocolos y regulaciones sobre uso de la fuerza.

Otro tema que inquieta al titular de la Cruz Roja Internacional es el de las constantes agresiones que sufren los migrantes indocumentados, tanto los que se dirigen a Estados Unidos como los que tienen a México como destino final.

Nos preocupa el impacto humanitario en la gente desplazada por la violencia, la injusticia y la persecución. Hemos desarrollado programas para asistir y proteger a los migrantes, en particular los que llegan en circunstancias difíciles en las fronteras norte y sur, apuntó.

Maurer saludó la reciente aprobación de la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas, recordó las aportaciones hechas por el CICR para diseñar esta norma y destacó la importancia de llevarla a la práctica de manera adecuada.

Esta es una situación muy específica; no podemos traducir todas nuestras experiencias de conflictos de guerra a lo que sucede en México, aunque hay temas que son recurrentes y el impacto humanitario a veces parece muy similar. Lo que nos interesa es cómo mitigar mejor el impacto humanitario. Hay similitudes, diferencias y tenemos que ver cómo transformarlo en buenas lecciones para el contexto mexicano, dijo.