Hoy se monta la última función de La historia del soldado
Domingo 1º de octubre de 2017, p. 4
Como parte de las celebraciones por el 75 aniversario del Seminario de Cultura Mexicana, la Compañía MX Teatro presenta hoy la tercera y última función de la obra La historia del soldado, en la que el compositor Igor Stravinsky (1882-1971) plantea de forma amena la importancia de saber vivir y apreciar el incalculable valor de lo simple.
El montaje de esta pieza corre a cargo de la actriz, dramaturga y directora María Morett, quien tradujo además el texto de su original en francés al español.
Con una hora de duración, La historia del soldado cuenta con libreto de F. Ramuz y fue escrita por Stravinsky durante la Primera Guerra Mundial, en un contexto de extrema austeridad que propició en el autor una propuesta que no requiriera de una inversión onerosa. Es más, fue concebida para ser representada en condiciones de gran pobreza, de allí que no sea ni una ópera ni un ballet completos.
La obra se vale de la música, el teatro y la danza para reinterpretar el mito fáustico, ya que narra cómo un militar es seducido por Satanás para que intercambie su alma –simbolizada por un violín– por riquezas y placeres.
En la versión original intervienen siete músicos y tres actores, y una de sus particularidades es que la música desempeña un papel central y no es un mero acompañamiento de las acciones. Incluso los músicos forman parte del trazo escénico.
La propuesta de María Morett utiliza tres narradores en lugar de sólo uno, como la original, para dar voz al soldado y al diablo, además de quien refiere las acciones, e incorpora una bailarina más, que hace de ayudante del diablo.
De igual modo, se encargó del vestuario y la escenografía, y pidió a Philippe Amand que realizara el diseño multimedia del montaje mientras Álvaro Hegewisch es responsable de la iluminación.
La conjunción de este equipo da como resultado una pieza atractiva y ágil que refiere una historia juguetona, por momentos cómica, y muy colorida, aspectos que se apuntalan en lo virtuoso de la partitura del compositor ruso.
Ésta tiene momentos emotivos diversos que van de la furia impetuosa a la alegría festiva y a cierto grado de melancolía. El ensamble musical en este montaje es dirigido por Enrique Barrios.
María Morett, según cuenta a La Jornada, llegó a esta obra porque disfruta mucho de la música escénica, además de que siente especial fascinación por la apariencia física y la música de Stravinsky.
“Veo fotos de él y me causa una emoción especial, algo de alegría; me parece que tiene algo de clown, algo que la vez me da ternura. Su música me encanta, me detona muchas sensaciones; especialmente La historia del soldado me parece genial, por esa interdisciplina que propone: música, teatro y danza”, señala.
Siempre me ha gustado mucho la música. Quería ser cantante, pero de esas cosas raras me metí a estudiar actuación para ser buena cantante que actuara, pero de repente el teatro me atrapó y me tiene encantada, aunque eso no me quita la fascinación por la música, el canto y la interdisciplina.
La creadora escénica realizó esta producción en 2015 a petición del programa Instrumenta Oaxaca y el Festival Eduardo Mata; lo estrenó ese mismo año en la capital oaxaqueña, primero en la versión en francés y luego en español.
Esta es la primera vez que la trae a Ciudad de México y, debido a que no necesita de muchos recursos, según comenta, espera poder llevarla de gira por diversos puntos de la República.
Luego de presentarse el viernes y el sábado, la última función de la obra será este domingo a las 12 horas en el Foro Castalia, del Seminario de Cultura Mexicana (Masaryk 526, Polanco), con entrada libre.