La tendencia alcista en los precios de casas y departamentos en Ciudad de México no se detendrá con los terremotos recientes, pues tras el desastre hay una explosión de nueva demanda de quienes perdieron o no pueden habitar sus viviendas.

Distintos especialistas en el sector explicaron que no se trata de que el desarrollador inmobiliario sea bueno o malo, sino de que así opera la oferta y la demanda. Si vendes naranjas y se venden rápido, aumentas el precio. En la medida en que empiecen las operaciones comenzará a reaccionar el mercado al alza, apuntaron.

Los precios van hacia arriba y con mayor ritmo. ¿En qué porcentaje?, aún no se sabe, porque influyen otros factores, como el crecimiento económico del país, el proceso electoral y las negociaciones del Tratado del Libre Comercio de América del Norte, pero no habrá cómo detenerlos, porque no hay una política de control de precios, afirmó Jorge Paredes Guerra, de Realty World Mexico.

Indicó que indiscutiblemente en algunas zonas afectadas, como las colonias Roma y Condesa habrá una migración temporal hacia puntos aledaños, como se ha observado en los días recientes y los inmuebles que resultaron con daños por el sismo tendrán una depreciación que se mitigará dependiendo de su rehabilitación, pero el resto mantendrán su valor.

Quizá a largo plazo haya una migración a Querétaro, Monterrey, Aguascalientes, pero en lo inmediato van a reubicarse en la misma ciudad y lo más cerca de donde han hecho su vida, porque dependen del trabajo y de la escuela de los hijos, apuntó.

Comentó que en los días pasados ya ha habido un incremento de 25 por ciento en los portales inmobiliarios pidiendo información de venta y renta de departamentos. “Conforme pase la emergencia este tráfico de solicitudes va a incrementar, porque la gente va a requerir de espacios habitacionales.

Independientemente de los inmuebles que colapsaron hay 2 mil o 3 mil con problemas de habitabilidad, esa demanda adicional a la que ya existía traerá repercusiones en el mercado, advirtió, al señalar que las recientes declaraciones del jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, de que no se tolerarán abusos en el incremento de las rentas cae en el ámbito de lo político.

Estamos en un modelo neoliberal y aquí se habla del mercado y no se han hecho políticas públicas de control de precio, puntualizó.

A su vez, el vicepresidente nacional de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), Alejandro Kuri, manifestó que en Ciudad de México existe una demanda de más de 10 mil viviendas en arrendamiento, que se está cubriendo a través de vivir en casas de familiares y/o rentas de pánico, tras los sismos.

Durante la presentación de la plataforma de apoyo a afectados por sismos S19S señaló que la mayor demanda se concentra en la zona siniestrada: Roma, Condesa, Hipódromo y Del Valle, donde la oferta está cubierta y su precio no disminuirá, pese al colapso de algunos inmuebles, debido a su excelente ubicación.

No hemos identificado un incremento en los precios, pero existe el riesgo de que se abuse en esta situación de pánico, lo cual puede convertirse en un gran problema, por lo que exhortó a los dueños de inmuebles en renta a firmar, de manera temporal, contratos de 3 a 6 seis con el valor actual, y después según el precio del mercado.

Los precios del mercado de las viviendas en venta, argumentó, no deben ni van a variar, porque hay una demanda real, esas colonias son muy apreciadas y aun cuando tenemos 44 edificaciones afectadas y, lamentablemente, la pérdida de muchas vidas, la ciudad está más activa que nunca.