Padres de familia exigen reconstrucción
Viernes 29 de septiembre de 2017, p. 41
Con manifestaciones, padres de familia y alumnos de seis escuelas primarias de los estados de México, Guerrero y Michoacán exigieron a las autoridades seguridad en las aulas, pues los inmuebles, aseguran, resultaron severamente afectados por el terremoto del pasado 19 de septiembre. En algunos casos, los inconformes pidieron la demolición y reconstrucción de los planteles.
Unos 150 padres y alumnos de la escuela primaria Alfredo del Mazo Vélez, en Cuautitlán, marcharon desde la glorieta de El Cerrito hasta el palacio municipal, donde exigieron a la alcaldesa Guadalupe Fernández Sánchez la demolición del plantel, que sufrió fracturas y hundimientos.
Policías impidieron el paso a los manifestantes, quienes informaron que unos mil 300 alumnos están en riesgo debido a que varias aulas podrían caerse. Según protección civil municipal, el inmueble, inaugurado en 1951, cumplió su ciclo de utilidad. La edil se comprometió a revisar el caso y solicitar apoyo a las autoridades educativas.
El ayuntamiento de Ecatepec informó que ha dictaminado daños en 260 escuelas, ocho de las cuales deberán ser demolidas, al igual que 151 aulas, reparar 332, tirar bardas perimetrales de 131 colegios (más de 5 mil 500 metros lineales) y reparar las de 64.
En Chilpancingo, Guerrero, padres de familia, maestros y alumnos del jardín de niños Luz y Alegría marcharon del monumento a Las Banderas hasta las oficinas del Instituto Guerrerense de Infraestructura Física Educativa de Guerrero (Igife), donde bloquearon la avenida para demandar que revisen la escuela, ya que los salones tienen cuarteaduras y la barda está fracturada.
En Acapulco, paterfamilias de la escuela primaria Carlos Carrillo Puerto bloquearon el bulevar Vicente Guerrero, uno de los principales accesos a la ciudad, para exigir a las autoridades educativas y de protección civil revisión de las instalaciones, pues aulas y bardas sufrieron daños estructurales, aseveraron.
Asimismo, familiares de alumnos de la escuela primaria Eva Sámano de López Mateos, de la colonia 6 de Enero, bloquearon la avenida frente al palacio municipal para exigir que se haga un peritaje, pues en la cancha se está abriendo un socavón.
En la parte alta de Acapulco, padres de alumnos de la primaria Vicente Guerrero impidieron el acceso a la colonia Morelos, en avenida Constituyentes, para exigir un dictamen que garantice que no existe peligro en las aulas. El director, Marco Antonio Soto Solís, detalló que la barda perimetral presenta daño estructural.
En Morelia, Michoacán, manifestantes obstruyeron la avenida Camelinas para exigir la reconstrucción de la escuela primaria Justo Sierra, donde las aulas se cuartearon y el piso se levantó. María de los Ángeles Zambrano, perito de obra 420 del departamento de licencias de construcción de la dirección de orden urbano del ayuntamiento, manifestó que la escuela no es segura.
Templo de Hidalgo, convertido en aula
Desde el pasado lunes, 75 alumnos de la escuela primaria Juan Escutia, del barrio El Calvario, municipio de Ixmiquilpan, Hidalgo, toman clases en un templo evangélico de la Iglesia Cristiana Bethel debido a las pésimas condiciones en que se encuentran sus aulas por el sismo del 19 de septiembre.
Aunque la ley prohíbe que templos religiosos sean utilizados para dar clases, el comité de padres de familia adujo que lo hacen por razones de seguridad.
Mientras, la Secretaría de Educación de Chiapas instruyó a las escuelas privadas de nivel básico, medio superior y superior, así como a los de capacitación para el trabajo, a que en 15 días naturales presenten el dictamen actualizado de seguridad estructural emitido por un perito debidamente acreditado.
En un comunicado, explicó que esta medida es para salvaguardar la integridad de alumnos, personal docente y administrativo en las escuelas incorporadas al sistema educativo estatal.
(Javier Salinas, Silvia Chávez, Sergio Ocampo, Héctor Briseño, Juan R. Montoya, Ernesto Martínez y Elio Henríquez)