El verdor de la isla desaparece tras el huracán, señala la comisionada residente
Siguen incomunicados 9 de 78 municipios
En total fallecieron 31 personas en el Caribe
Lunes 25 de septiembre de 2017, p. 36
San Juan.
La destrucción que dejó el huracán María en Puerto Rico hizo retroceder de 20 a 30 años a la isla, aseguró Jenniffer González, comisionada residente, incluso cuando las autoridades aún trabajan para evaluar la magnitud del daño.
La devastación de propiedades es total. Hay familias sin casa y escombros por doquier. El verdor de la isla desapareció
, agregó la delegada del territorio.
Ingenieros planeaban inspeccionar la represa de Guajataca, de 90 años de antigüedad, la cual tiene una reserva que cubre alrededor de 5 kilómetros cuadrados en el noreste de Puerto Rico. El gobierno informó que la presa tiene una enorme grieta luego de que María depositó casi 40 centímetros de lluvia en las montañas aledañas y advirtió que colapsará en cualquier momento
. Residentes del área fueron desalojados, pero comenzaron a regresar a sus casas este domingo luego de que un aliviadero aminoró la presión en la presa.
La Guardia Nacional de Puerto Rico desvió un barco petrolero que se liberó y amenazó con chocar en la costa del sureste de la isla, informó el gobernador Ricardo Rosselló. Los funcionarios continúan sin poder comunicarse con nueve de los 78 municipios.
Esto es un desastre mayor
, dijo Rosselló. Hemos tenido daño extenso. Esto va a tomar tiempo
, apuntó.
El número de muertes a causa de María es de al menos 10 personas, incluidos dos policías que se ahogaron en las inundaciones del poblado de Aguada, en el oeste del territorio. Se prevé que la cifra aumente a medida de que los funcionarios de municipios lejanos continúen la revisión junto con las autoridades en San Juan.
En el Caribe 31 personas murieron tras el paso del huracán, al menos 15 en la isla de Dominica.
Por lo pronto, María perdió fuerza mientras se desplazaba hacia el norte y se degradó a huracán de categoría 2, con vientos hasta de 140 kilómetros por hora. Este domingo se encontraba en el Atlántico, unos 855 kilómetros al sur-sureste de Cabo Hatteras, en Carolina del Norte, Estados Unidos, y avanzaba hacia el norte. Tanto Carolina del Norte como Carolina del Sur y otros estados ubicados más al norte en la costa atlántica deben vigilar el progreso de María, advirtió el Centro Nacional de Huracanes de Miami en su informe.