Hay 119 heridos y 20 mil casas dañadas en 20 municipios
Aplica el Ejército el Plan DN-III-E en Jojutla, el más afectado
Jueves 21 de septiembre de 2017, p. 18
Jojutla, Mor.
Entre la tarde del martes y ayer fueron rescatados 14 cadáveres de los escombros de las construcciones derribadas por el terremoto de magnitud 7.1, por lo que el número de víctimas fatales en Morelos aumentó a 73, entre ellos algunos menores de edad. Asimismo, hay 119 heridos y unas 20 mil casas dañadas en 20 de los 33 municipios, informó el gobernador Graco Ramírez.
Al terminar los honores a la bandera (a media hasta), donde declaró cinco días de luto, el político perredista aseguró que se emitió una declaratoria de emergencia para los 33 municipios, ya que tienen afectaciones en diferentes escalas.
Sin embargo, la Fiscalía del estado precisó que sólo 43 cadáveres fueron levantados por trabajadores de la dependencia. El Servicio Médico Forense detalló que 23 fueron ubicados en la zona Sur, 13 en la Metropolitana y siete en la región Oriente.
En Jojutla, donde hay cientos de viviendas con daños, el Ejército mexicano aplicó a partir de este miércoles el Plan DN-III-E.
La clínica del IMSS y el hospital general José G. Parres están funcionando de manera parcial por las grietas y daños que sufrieron por el sismo.
El gobernador reiteró que el municipio más afectado es Jojutla, ya que hubo al menos 16 decesos, solicitó ayuda de otras entidades y recomendó mucha solidaridad y unidad para enfrentar esta desgracia que afectó a 20 mil familias.
Calificó de hecho inédito el sismo, un sismo de tal magnitud, más fuerte que el de 1985, la intensidad fue muy alta y jamás pensamos que fuéramos epicentro de temblor; hablamos de Guerrero y de Oaxaca, de Chiapas, pero jamás pensamos que en Axochiapan tuviéramos un epicentro, eso fue una verdadera sorpresa para todos
, narró.
Según las autoridades estatales la mayoría de los decesos fue por la caída de viviendas o bardas. Es el caso de la señora Consuelo Sánchez, de 62 años, y de su nieta, Amor de Guadalupe (de dos años), quienes se encontraban solas en su casa, ubicada en la esquina de las calles 18 de marzo y 10 de abril, en la colonia Emiliano Zapata, una de las más afectadas, al igual que el centro de Jojutla, municipio ubicado al sur de la entidad.
La vivienda, de dos pisos, quedó convertida en escombros y polvo. Cuando fueron rescatadas por elementos de Protección Civil y del Ejército Mexicano dos horas después del temblor, ya habían perdido la vida.
María, la madre de Amor de Guadalupe, se encontraba trabajando en el IMSS. José Sánchez, hermano de la abuela, demandó al presidente y al gobernador que le ayuden a reconstruir la casa a su sobrina María, ya que ella se quedó sin nada más que el bolso que se llevó al trabajo el martes del temblor.
Abuela y nieta fueron veladas en la funeraria La Paloma de la Paz. Después se enterrarían en el panteón Pedro Amaro, donde se ubican tres fosas clandestinas de la Fiscalía General del Estado y de donde se exhumaron 88 cuerpos en abril y mayo pasado, porque fueron enterrados sin cumplir los protocolos de ley.
Así como María, sin familiares, sin casa y sin nada, así quedaron cientos de familias en esta cabecera municipal, donde Protección Civil estatal calcula en 2 mil las casas dañadas.
Este miércoles, mientras el presidente Enrique Peña Nieto visitaba la cabecera municipal de Jojutla, varias familias lloraban y velaban a sus parientes muertos durante el temblor de magnitud 7.1 ocurrido este martes con epicentro en Axochiapan, Morelos.