En las pesas cada quien da la versión de los hechos y es por eso que el presidente de la federación, Rosalío Alvarado, afirma tener la conciencia tranquila. Niega tener algo personal en contra de Carolina Valencia, quien supo con antelación que no podía competir en el Centroamericano de Guatemala y aún así viajó sólo para hacer su movimiento, grabarnos en video y todo lo que subió en las redes sociales.

El directivo asegura que en ningún momento ha tratado de perjudicar a la medallista panamericana –como ésta denunció ante la Comisión de Apelación y Arbitraje del Deporte (CAAD)– e inclusive cumplió el ordenamiento que emitió el tribunal nacional el 15 de agosto para inscribir a Valencia.

Sin embargo, la federación recibió esa notificación el 6 de septiembre y al día siguiente solicitó a su similar de Guatemala registrar a la pesista, pero el comité organizador respondió el día 11 que no se hizo porque ya estábamos fuera del término (plazo), como se constata en las copias que tiene La Jornada.

Alvarado, quien se encuentra en Guatemala para el certamen regional que comienza hoy, confirmó que el pasado domingo se entregó la notificación a la quintanarroense en el aeropuerto capitalino antes de abordar el avión. Refiere que ese documento fue enviado con anticipación a la pesista por correo electrónico, al igual que al metodólogo de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), Eufemio Zamudio, quien también está con la selección femenil y varonil en ese país, así como al Comité Olímpico Mexicano (COM).

Nosotros le contestamos a la CAAD de todo lo sucedido, de lo que mandamos y recibimos de los guatemaltecos, de los permisos asistenciales que solicitamos al COM para la concentración del 8 de septiembre, a la que Carolina estaba convocada y no se presentó, subraya el federativo.

Se le ha apoyado

Tampoco entiende por qué Carolina se queja, pues ha recibido el apoyo de la federación, que guardó por secrecía lo de su dopaje en el Mundial de Polonia en 2013, por el cual recibió una sanción de dos años.

Pagamos el hospedaje y alimentos de ella y de su abogado (Ricardo de Buen) en Kazán. Agotaron todos los trámites de defensa ante la Agencia Mundial Antidopaje y el TAS (Tribunal Arbitral del Deporte). Salió dopada con dos sustancias y yo recibí muchas críticas por respetar los estatutos. No podía decir nada hasta que salió lo oficial por la Federación Internacional de Pesas, recordó Alvarado.

Valencia hizo los viajes aéreos a Guatemala apoyada por la Conade, institución que también aportó el pago de 10 personas, entre competidores, cuatro entrenadores, una doctora y un juez, y el resto lo absorbió la federación, señala Alvarado, quien espera que su deporte logre buenos resultados en la justa, donde este día compite la tapatía Andrea de la Herrán, en 48 kilogramos, la división de Carolina.

Precisó que la oriunda de Chetumal está considerada para el Mundial de Mayores en Estados Unidos (Anaheim), en noviembre, a pesar de que ella no busca el diálogo y lesiona la integridad de la gente al dar una versión que no es cierta, porque sabía que no estaba inscrita en el Centroamericano.

Alvarado menciona que se da oportunidad a todos sus representados y si alguien tiene algún problema personal y legal como Carolina Valencia en su entidad, es cuestión de comunicarlo y “no abandonar la concentración en el CDOM, como lo hizo ella antes de ir al Panamericano de Miami (en julio) y al día siguiente presenta un escrito por cuestión laboral.

“No la estamos lesionando ni le quitamos su derecho como los demás. No tengo por qué pelearme con nadie, por eso le hablé al presidente de la asociación de Quintana Roo para decirle: ‘¿qué está pasando con Carolina?’”