De ser considerado estado tradicionalmente petrolero, Campeche se ha visto forzado a transformar su economía tras el desplome en la producción y el precio del crudo en este sexenio, lo que le ocasionó la pérdida de miles de empleos y un endeudamiento millonario de Petróleos Mexicanos (Pemex) a decenas de empresas que operaban como sus proveedoras.

Campeche contabilizó 119 mil 47 empleos formales ante el Instituto Mexicano del Seguro Social en agosto de 2017, lo que implica reducción de 22 por ciento respecto a los 152 mil 435 que tenía en 2013, primer año del gobierno de Enrique Peña Nieto, cuando apenas entraba en vigor la reforma energética. Si se toma en cuenta a los trabajadores informales y formales, la tasa de desocupación en Campeche repuntó a 4.02 por ciento en el segundo trimestre de 2017, en contraste con las cifras de 3.93 y 3.73 por ciento del primer trimestre de este año y el último de 2016, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Inegi.

Apenas hace cinco meses, Pemex liquidó totalmente el adeudo de 36 mil millones de pesos que acumulaba con 202 compañías de Campeche, aseguró en entrevista José Domingo Berzunza Espíndola, secretario de Desarrollo Económico de la entidad.

El funcionario confío en que no haya más recortes de personal en este año por la empresa productiva del Estado, pues dijo que por lo menos así está establecido en su plan de negocios.

Por lo pronto, para hacer frente a las nuevas circunstancias y reactivar la economía y el empleo en esa entidad del Golfo de México, empresas y población se han volcado o retomado actividades productivas, entre ellas el sector agropecuario en sus distintas ramas, como el ganadero y el pesquero, que han repuntado. Hacia ellos se han trasladado muchos empleos perdidos en el sector petrolero, destacó el funcionario, quien la semana pasada fue nombrado presidente de la Asociación Mexicana de Secretarios de Desarrollo Económico. También se ha reforzado la industria maquiladora y el sector turístico. El gobierno de Alejandro Moreno, quien apenas hace un año asumió el poder, impulsa esas nuevas actividades económicas a partir de un paquete de 18 acciones y apuesta a emprender e innovar, explicó Berzunza.

El principal problema que enfrentó el nuevo gobierno fue la falta de liquidez por el incumplimiento de de pagos de Pemex a sus proveedores, dijo el secretario.

Esta crisis nos ha obligado a buscar nuevas oportunidades, a reinventarnos. Se ha frenado la caída del empleo y una buena noticia es que no hay cierre masivo de empresas y hemos buscado nuevos mercados. Los empresarios contribuyen con el estado, comentó.