Viernes 8 de septiembre de 2017, p. 14
El agro mexicano se encuentra en la antesala de la quiebra
, porque la producción nacional de alimentos ha sido desplazada por las importaciones, advirtió el dirigente de la Unión General Obrera Campesina y Popular (Ugocp), Luis Gómez Garay.
Afirmó que más de 40 por ciento de los campesinos y jornaleros viven en pobreza y marginación, hay crecimiento de la inseguridad en el sector y los precios que se pagan al productor son miserables.
Asimismo, sostuvo que las compras masivas de productos agropecuarios en el extranjero han derribado
artificialmente los precios internos, mantienen deprimidos los salarios en el campo y, paradójicamente, el costo de la canasta básica alimentaria sube.
Planteó que mientras la banca obtuvo en el año reciente utilidades por 107 mil millones de pesos que salieron del país, porque la mayoría de las instituciones son extranjeras, y en el primer semestre de 2017 ya elevó sus ganancias 25 por ciento, sectores como el agrario están al borde de la quiebra.
En su opinión, se requieren cambios estructurales que resuelvan la larga crisis productiva de más de tres décadas, la cual ha arrojado a la miseria y marginación a la mayor parte de campesinos. Se requieren cambios estructurales, romper la enorme loza que significan los intereses creados en el campo y un nuevo rumbo al agro mexicano que lo saque del estancamiento
, dijo Gómez Garay.
Destacó que el abuso en las importaciones derriba los precios internos de los alimentos agropecuarios, y mientras a los campesinos se les paga su trabajo en centavos, los intermediarios de la Central de Abasto de la Ciudad de México elevan a su gusto los precios a los consumidores. Por ejemplo, señaló, el costo de la papa se encareció 87.5 por ciento respecto del año pasado, el limón 42 y el chile poblano 66 por ciento.
El dirigente de la Ugocp demandó retirar el capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte hasta que existan las condiciones que fomenten la competitividad del sector nacional.