Una corte de San Francisco falla contra su decreto que impide el ingreso de musulmanes a EU
no tienen de qué preocuparse... hasta marzo
Viernes 8 de septiembre de 2017, p. 25
Washington.
Dos días después de cancelar el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), Donald Trump aseguró este jueves a los jóvenes indocumentados beneficiados que no deben preocuparse, hasta marzo.
La cancelación del DACA afectará a más de 800 mil jóvenes sin documentos (conocidos como dreamers) que estudian y trabajan en Estados Unidos, y que podrán ser deportados a sus países de origen, que en muchos casos no conocen y en los que no tienen nada.
En este contexto, el mandatario sufrió otro revés luego de que una corte de apelaciones en San Francisco falló en contra de la prohibición de ingreso a personas provenientes de países de mayoría musulmana, que ordenó por decreto, en una de las primeras medidas que adoptó por orden ejecutiva al asumir la presidencia, en enero pasado.
La decisión del tribunal obliga a la administración a admitir el ingreso al país de personas con parentescos en segundo grado de quienes habiten legalmente en Estados Unidos. Esto obliga a la administración a aceptar el ingreso de abuelos, primos y otros parientes.
Para todos aquellos (DACA) que están preocupados por su situación durante el periodo de seis meses, no tienen nada de qué preocuparse. ¡No (habrá) acción!
, escribió el presidente en su cuenta de Twitter.
Su administración canceló el martes el DACA, programa aprobado por el presidente Barack Obama en 2012 que desde entonces ha protegido de la deportación a los jóvenes que llegaron a Estados Unidos cuando eran niños.
Con esta declaración en su cuenta de Twitter, Trump accedió a un pedido urgente de la líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, de enviar un mensaje de confianza a los dreamers.
Trump apremió al Congreso a aprobar una solución legislativa en los seis meses de prórroga, y su administración aseguró que no va a ponerlos como objetivos prioritarios para la expulsión.
Los beneficiarios del DACA tienen permisos temporales para estudiar y trabajar en Estados Unidos. En marzo comenzarán a caducar y será a partir de entonces cuando los dreamers se enfrenten a la posibilidad de ser deportados, si el Congreso no ha encontrado una solución legislativa.
La gran mayoría de los 800 mil jóvenes, 78 por ciento, son de origen mexicano.