Nueva York.

Respeto pero no amistad. Así se podría resumir la relación entre el español Rafael Nadal y Juan Martín del Potro, protagonistas este viernes de una de las semifinales del Abierto de Estados Unidos. En la otra se medirán el también ibérico Pablo Carreño Busta y el sudafricano Kevin Anderson.

Desde el histórico exabrupto del argentino tras la semifinal de la Copa Davis 2008 ante España, cuando ante más de 12 mil personas en el estadio argentino y algunos millones por televisión, Del Potro incitó a sus compatriotas a sacarle del orto los calzones a Nadal, la relación entre ambos siempre bordeó la tensión.

No hubo encuentro público en el Abierto de Madrid un mes después, cuando Del Potro ya se había arrepentido de sus dichos, pero trascendió una señal de tregua de parte de Nadal: “No tienes que disculparte de nada, vente a mi habitación a jugar a la play”.

El momento de mayor tensión lo vivieron en los octavos de final de Wimbledon 2011. Justo antes del tie break del set inicial, Nadal pidió asistencia médica por un fuerte dolor en el pie.

El desencuentro surgió por el diálogo que mantuvo el argentino con el juez de silla en ese momento. Para Nadal, estaba protestando por el tiempo que el árbitro le diera a su rival para recuperarse. Nadal no le creyó. Nada de eso. Yo sé lo que vi y escuché, dijo el español después del partido que ganó y consideró uno de los mejores triunfos sobre hierba de su carrera.

Tampoco le han faltado épica a los 13 encuentros entre ambos, con ocho triunfos de Nadal y cinco de Del Potro.

Pero como siempre, el respeto y el protocolo prevalecieron de cara a la semifinal: “Del Potro es un jugador top. No lo es (en el ranking), porque no ha jugado mucho. Pero es top”, dijo Nadal. “Una falla con Nadal te puede costar el partido. Cada momento que no pueda jugar bien me va a costar un set o el partido. Él está jugando muy bien este año y es el número uno del mundo”, devolvió Del Potro.

En tanto, los españoles Feliciano y Marc López clasificaron a la final de dobles al vencer a los hermanos estadunidenses al Bob y Mike Bryan; jugarán por el título ante el holandés Jean-Julien Rojer y el rumano Horia Tecau.