El PAN, sin nombres con perfil
Barrales, candidata del FAD
Listos, relevos en el gobierno
no de los problemas más grandes que enfrenta el Partido Acción Nacional en esta ciudad, además de haber perdido un porcentaje muy importante de sus bases, o mejor dicho, clientela –término que nos parece adecuado para el pensamiento azul–, es que no tiene un candidato para la jefatura de Gobierno más o menos competitivo y, como dijimos, su clientela está muy mermada.
En las filas panistas se han ido descartando nombres y hoy por hoy a nadie le suena uno que pueda hacer frente al reto de reconstruir ese partido en la capital y al mismo tiempo recobrar cuando menos algo de lo que ha perdido.
En este escenario, las posibilidades de que Alejandra Barrales se convierta en la candidata del FAD a la jefatura de Gobierno no suena nada descabellado, y con esos datos en la mano es que la lideresa nacional del PRD iniciará un gira de trabajo por todas las delegaciones en búsqueda de lo que también el PRD ha perdido en la metrópoli.
Cuando menos en la Ciudad de México las cosas no pintan bien para los azules, y por ello, con o sin el FAD, lo más conveniente para Acción Nacional es aceptar, en este caso, a una candidata que cuando menos les prometa una chamba, en caso de ganar, y eso sí es peligroso para los amarillos, que construyeron el PRD con base en el pensamiento cardenista, porque, hay que recordar, el PAN se creó para enfrentar al cardenismo, que luchaba por mejorar la forma de vida de los mexicanos.
Y hoy, esas dos partes que tienen diferencias profundas, simple y sencillamente se unen en un pacto por la ambición, que no tardará mucho en desfondarse, por lo mismo: la terrible ambición de quienes lo suscriben, y que prometen que su unidad es más que nada en contra de que el PRI siga en el poder. Pero, curiosamente, no prometen el cambio que se requiere, a escala nacional, y no da idea de cuál podría ser el camino aquí en la ciudad capital.
Por lo pronto, el tiempo no alcanzará para que se logre revalorar el gobierno de Miguel Ángel Mancera, y eso quiere decir que será necesaria una gran campaña que muestre con todo detalle cuáles han sido los alcances de esta administración, por lo que el candidato o candidata que se suponga, o provenga, de las filas del PRD, tendrá que batallar el doble para convencer a la gente de que son opción.
Y en esa circunstancia lo más probable es que cuando menos a los amarillos les pese más cargar con los azules, que llevar encima todos los desatinos que han causado las decisiones influenciadas por el chuchismo, que ha manchado con el azul de la derecha una opción política que nació para frenar el crecimiento de la más peligrosa de las derechas: la que encadena la vida del país al ir y venir del mercado.
De todas formas, el PRD, hasta donde nos dicen, llevará candidata, y también nos explican que está lista para la guerra. Ojalá no le pesen tanto los sacos de errores cometidos por la tribu chucha.
De pasadita
Todo parece estar listo para los relevos en el gobierno de la ciudad, y aunque no se ha decidido el total de los cambios, parece que lo fundamental ya tiene nombre y apellido. En la jefatura de Gobierno ya se tiene como seguro al abogado José Ramón Amieva, cuyo nombre ha sido recibido en todos, o casi todos, los ámbitos, como garantía de trabajo y preocupación por la ciudad. Pero faltan sorpresas, cosa de estar atentos. Quienes saben algo del asunto prometen que son tiempos de quijadas abiertas. ¿Será?