Jueves 31 de agosto de 2017, p. 5
El Consejo Universitario de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) pidió a las autoridades de los diferentes niveles de gobierno que no haya impunidad en los ilícitos cometidos en contra de los universitarios y exigió el cumplimiento de su labor fundamental que es ‘‘garantizar la seguridad de todos’’.
En el informe de la Comisión Especial de Seguridad del Consejo Universitario, se reconoce que la problemática que aqueja a los planteles de la UNAM y sus alrededores es de ‘‘considerable magnitud e impacto’’.
Sin embargo, considera que esta problemática es consecuencia de la realidad que en materia de inseguridad y violencia vive el país, principalmente en Ciudad de México y estado de México, entidades que albergan a la gran mayoría de la población universitaria.
Presentado por Jesús Salinas Herrera, presidente de dicha comisión, el informe da cuenta de las acciones preventivas en materia de seguridad implementadas principalmente tras la muerte de la joven Lesvy Osorio, en mayo pasado en las inmediaciones de Ciudad Universitaria.
Controversia por rejas
Se cita que entre estas medidas están la sustitución de luminarias, mejora de las condiciones de movilidad, instalación de más cámaras de vigilancia y recuperación de espacios por medio de la colocación de rejas en varios puntos del campus.
Tras la presentación del informe, una veintena de consejeros cuestionaron la colocación de las rejas. Durante sus intervenciones se plantearon propuestas para ‘‘profesionalizar’’ a los elementos de vigilancia e incluso hubo señalamientos ante un problema de ‘‘crisis de inseguridad’’ en el campus, con la comisión de delitos federales como es el narcomenudeo.
El consejero Gonzalo Zurita dijo: ‘‘La UNAM no es narcomenudeo ni es comunidad en crisis; es cultura, es la diversidad académica que reconocemos en este pleno, es promesa de miles de jóvenes, como yo’’.
Por su parte, el rector Enrique Graue, quien habló al final de la sesión, expresó: ‘‘A mí tampoco me gustan las rejas y entiendo que ponerlas no elimina narcotraficantes ni narcomenudeo en nuestra universidad. Las rejas están y se pusieron porque (los delincuentes) habían hecho suyos esos espacios y se habían apoderado de lugares que eran, que son nuestros e impedían su correcta identificación’’, señaló.