Durante la reunión previa al inicio del periodo de sesiones del Congreso de la Unión, el presidente Enrique Peña Nieto llamó a los senadores del PRI y del Partido Verde a cerrar filas, a dar el jalón final en la última fase del sexenio y promover los resultados de las reformas estructurales. Pidió priorizar la aprobación del paquete de seguridad –incluida la ley de seguridad interior– y los nombramientos de los fiscales general de la República y anticorrupción.

En la residencia oficial de Los Pinos, Peña Nieto no mencionó expresamente nombres de quienes ocuparían estos encargos, si bien en entrevistas previas al encuentro los legisladores demandaron al PAN no satanizar al procurador general de la República, Raúl Cervantes Andrade, al que definieron como funcionario de probada experiencia y trayectoria que genera consensos.

Con la presencia de los secretarios de Hacienda, José Antonio Meade; de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y de Educación, Aurelio Nuño, así como el dirigente del tricolor, Enrique Ochoa, en el encuentro Peña Nieto llamó a cerrar filas en la última etapa de su sexenio. El senador Luis Armando Melgar, del PVEM, dijo que en la reunión el jefe del Ejecutivo también demandó que se convirtieran en promotores de los resultados de las reformas que el Congreso contribuyó a aprobar en su momento, porque ya se están cumpliendo.

Coincidentes en que Peña Nieto estuvo de muy buen ánimo durante las dos horas y media que se prolongó el encuentro –hoy el Presidente hará lo propio con los diputados del PRI y el PVEM–, los asistentes comentaron la petición recibida de sacar adelantes los pendientes en materia de seguridad.

–¿Les pidió apoyar a Raúl Cervantes?

–No fue el tema. Fue un saludo, un recuento y un análisis reflexivo de las reformas estructurales, de cuáles son las consecuencias, cuáles son los resultados de la economía... en fin, fue una reunión muy cordial, una reunión de trabajo, aseveró el senador priísta Gerardo Sánchez.

–¿Qué les pidió el presidente?

–Simplemente creo que fue un diálogo amistoso. Nos pidió seguir con esa cordialidad, con esa corresponsabilidad con el pueblo de México y ser congruentes con las reformas que tenemos que impulsar –apuntó.

Entrevistado por separado, el senador priísta Jesús Casillas Romero sostuvo que en la reunión les pidieron promover los logros de la administración y los beneficios de las reformas estructurales. Agregó que también les requirieron ser soldados del PRI para la etapa que está por venir.

Asistente al encuentro en su calidad de legislador, el dirigente petrolero, Carlos Romero Deschamps, fue mucho más escueto en sus respuestas sobre los temas tratados.

–¿Se habló sobre el fiscal anticorrupción?

–Se conversó sobre este sistema, es algo que hay que hacer.

–¿Les pidió el presidente acelerar el paso en este tema, en que otro cree que haya pendientes y que se deba agilizar?

–Siempre habrá que hacer, estamos comprometidos en la buena marcha del país, es la convocatoria en general que nos hizo el Presidente y estamos comprometidos en ello; yo creo que no hay ningún mexicano que pretenda desviarse de un proyecto de nación que enriquezca el futuro de los mexicanos.

Para el senador Patricio Martínez, los términos del diálogo fueron amables y desinhibidos, pues más que un encuentro político, fue una reunión de camaradería.