Londres.

El saltador de altura Édgar Rivera se convirtió en el primer atleta mexicano en clasificar a una final en el Mundial de Londres 2017, donde el jamaicano Usain Bolt, el mejor velocista de todos los tiempos, disputará este sabado su última prueba antes de retirarse, en el relevo 4x100 metros.

Rivera, quien vive y entrena en Alemania, superó la altura de 2.29, lo que le sirvió de pasaporte a la final del domingo, después de sufrir en el 2.26. Antes había pasado los 2.17 y 2.22 metros.

Rivera, cuya mejor marca es el récord mexicano de 2.30 –que alcanzó por segunda vez en marzo pasado– falló en sus tres saltos el 2.31 fijado por la organización del mundial como referente para avanzar a la final. Sólo cuatro atletas acertaron, así que el mexicano entró con el 2.29 como uno de los doce mejores entre 27 participantes. Terminó séptimo de su grupo y décimo general en la final que encabeza el qatarí Mutaz Essa Barshim.

Hemos dado un primer paso y creo que será una final muy pareja. Estoy bien concentrado para hacerlo bien, afirmó Rivera al término de la prueba.

El mexicano sabe que en la final no estará entre los favoritos, pero se ve capaz de dar la sorpresa. Las medallas, cualquiera puede ganarlas. Yo quiero ser un contendiente ahí, voy a darlo todo en la final, sostuvo el atleta de 26 años, el mediano de tres hermanos sonorenses destacados en el atletismo, con el mayor Luis como emblema de la familia, tras su bronce en salto largo en el Mundial de Moscú 2013.

Este es el tercer Mundial de Édgar Rivera, después de no conseguir superar la ronda de calificación ni en Daegu 2011 ni en Moscú 2013, como tampoco la final olímpica en Río 2016.

Margarita Hernández había sido la única mexicana hasta ahora en una final en Londres 2017, en 10 mil metros, pero en esa prueba no hubo eliminatoria y terminó en el puesto 29 entre 31 participantes.

EU suma dos oros

Atletas de Estados Unidos se llevaron dos de los cuatro títulos disputados ayer, mientras Darya Klishina aportó la segunda medalla al equipo neutral de atletas rusos, al obtener la plata en el salto largo, con registro redondo de siete metros exactos, supe-rada por la campeona estadunidense Brittney Reese, quien apenas saltó dos centímetros más (7.02) para agenciarse su cuarta corona mundial

No saltaba siete metros desde hace seis años. Esperé mucho tiempo para poder lograrlo, quería hacerlo el año pasado en los Juegos Olímpicos de Río, pero no tuve la oportunidad por toda la situación (del escándalo de dopaje) que rodea a mi país, explicó la rusa de 26 años, campeona mundial juvenil en Ostrava 2007.

Édgar Rivera (arriba) avanzó con la marca que logró en su cuarta ronda. Darya Klishina fue vencida por la campeona estadunidense Brittney Reese, quien apenas se alcanzó dos centímetros másFoto Afp y Ap

Un total de 19 atletas de Rusia fueron aprobadas por la Federación Internacional de Atletismo, en el que sólo Sergey Shubenkov había subido al podio, con la medalla de plata en 110 metros con vallas. En caso de ganar el cetro en alguna prueba, ningún ruso podrá escuchar las notas de su himno nacional en el estadio.

Reese destronó a su compatriota, Tianna Bartoletta, cam-peona en Pekín 2015 y ahora bronce con salto de 6.9. En este duelo estadunidense ganó una vez más Reese, monarca en Berlín 2009, Daegu 2011, Moscú 2013, además de oro olímpico en Londres 2012 y plata en Río 2016.

Schippers consigue doblete

La holandesa Dafne Schippers, quien dejó el heptatlón para concentrarse en 200 metros, confirmó que tomó la decisión correcta al lograr su segundo título mundial consecutivo en la prueba.

La marfileña Marie Josée Ta Lou iba a hacerse con el oro, pero la holandesa de 25 años hizo un último esfuerzo para cruzar primera la meta con estirón de torso, con 22.05 segundos, su mejor crono de la temporada.

La africana Ta Lou, de 28 años, quien ya había sido plata en la prueba de 100 metros, repitió subcampeonato del mundo en 200 en Londres, con marca de 22.08, nuevo récord nacional de su país, mientras el bronce fue para la joven bahameña Shaunae Miller-Uibo (22.15), campeona olímpica en Río en 400 metros.

Las estadunidenses Emma Coburn y Courtney Frerichs se hicieron con el oro y la plata en la prueba de 3 mil metros obs- táculos, sorprendiendo a las favoritas kenianas.

Celliphine Chespol, Hyvin Jepkemoi y Beatrice Chepkoech, las tres representantes del país africano, que tenían por este orden los tres mejores registros de la temporada, terminaron respectivamente en sexta, tercera y cuarta posición. La bareiní de origen keniano, Ruth Jebet, vigente campeona olímpica y recordista mundial, se tuvo que conformar con la quinta plaza.

El otro oro de la jornada fue para el polaco Pawel Fajdek, que logró su tercer título mundial de martillo con un lanzamien- to de 79.81 metros.