París.

El brasileño Neymar, fichaje estrella del Paris Saint-Germain, se presentó ayer frente a su nueva afición en el estadio Parque de los Príncipes, antes de la victoria del equipo parisino 2-0 ante el Amiens en el arranque de la nueva temporada de la liga francesa.

Antes del duelo, decenas de miles de aficionados vitorearon al brasileño de 25 años, quien esta semana se convirtió en nuevo jugador del PSG después de que el equipo pagó los 222 millones de euros (263 millones de dólares) de la cláusula de rescisión de su contrato con el Barcelona.

Durante más de un minuto, los hinchas cantaron Neymar, Neymar, mientras el astro brasileño, vestido con la camiseta número 10, se paseaba por el césped del Parque de los Príncipes. En el negocio de venta del club, esa camiseta se agotó, con más de 12 mil vendidas desde que se conoció la noticia del arribo del crack.

El presidente del PSG, Nasser al Khelaifi, saludó personalmente a su nueva superestrella, mientras Neymar dirigió unas palabras a los aficionados y subrayó que se encontraba muy feliz de estar en París. Es mágico estar aquí, resaltó. Les prometo trabajar duro y ganar títulos.

A pesar de su presencia, Neymar no estaba habilitado para disputar el partido, ya que el Barcelona y la liga española no enviaron a tiempo la transferencia del jugador para su inscripción en la liga francesa (LFP).

Según informó el diario L’Équipe, era necesario que el documento llegara a las oficinas de la LFP antes de la medianoche del viernes, algo que no sucedió. Esa tardanza del Barcelona en hacer el envío impidió el esperado estreno.

Más allá de esa circunstancia, Neymar tuvo su bautismo en una tradición habitual para los nuevos jugadores, que deben cantar frente a sus compañeros.

Aplaudiendo y cantando, Neymar se paró en una silla y recibió la ovación del grupo. El italiano Marco Verratti celebró la actuación del nuevo integrante del equipo, la grabó con su teléfono móvil y la difundió mediante su cuenta de Instagram.

En el partido, el PSG derrotó al Amiens con goles del uruguayo Edinson Cavani, al minuto 42, y del argentino Javier Pastore, al 80. El equipo parisino busca volver a conquistar la Ligue 1 después de que el Mónaco pusiera fin, la temporada pasada, a una racha de cuatro títulos seguidos.

El padre de Neymar aseguró que fue la actitud del Barcelona lo que lo llevó a dejar de intentar convencer a su hijo para que se quedara en el club español.

Las heridas que dejó el millonario traspaso del brasileño en la relación entre los dirigentes azulgranas y el entorno del jugador siguen abiertas. Su padre y representante dijo de madrugada en una entrevista en la emisora Cope que él estaba con el Barça cuando su hijo comenzó a meditar su salida, pero el curso de las negociaciones le hizo cambiar de opinión.