Justin Gatlin sorprende y gana la medalla de oro; la plata fue para Christian Coleman
La salida me mató; eso explica por qué perdí
, dijo el relámpago jamaicano tras la final
La etíope Almaz Ayana triunfa en los 10 mil; mexicana Hernández termina en el lugar 29
Domingo 6 de agosto de 2017, p. a13
Londres.
Encarnado en el estadunidense Justin Gatlin, Dark Vader montó una conspiración con el dios Cronos y juntos hicieron desvanecer la galaxia del rey, el rayo jamaicano Usain Bolt, quien, incrédulo, claudicó y cedió el trono de los 100 metros planos.
Nadie lo podía creer. “Is a fake (es falso)”, gritaban a viva voz miles de aficionados británicos al presenciar la victoria de Gatlin en el hectómetro del Campeonato Mundial de Atletismo de Londres.
En las gradas se escuchaban abucheos constantes y fuertes ataques verbales hacia el nuevo campeón, un hombre que dio dos veces positivo por dopaje en su carrera profesional, pero que sigue negado a alejarse de las pistas aunque tiene 35 años en sus costillas.
Para colmo le aguó la fiesta a Bolt en una noche de celebración, en el día de su adiós a los 100 metros, en el momento que recogería para siempre su alter ego y lo guardaría en las gavetas de la historia del deporte, para tal vez comenzar una nueva vida en el futbol.
Sin embargo, nadie puede engañarse. Además de la actuación de Gatlin, quien se impuso con tiempo de 9.92 resuelto en foto finish, Bolt (9.95) finalizó en la tercera posición, superado además por el también estadunidense Christian Coleman (9.94).
Registros de risa para Bolt, ser sobrenatural que llegaba trotando a la meta en sus mejores tiempos y era capaz de detener los relojes en 9.80 o por el estilo.
Cronos cobró factura
El dios Cronos hizo acto de presencia. Los casi 31 años del rayo caribeño y el pobre nivel de sus entrenamientos en la presente temporada le pasaron factura.
De hecho, fue el peor tiempo para un ganador de la final de un Mundial desde la cita de París 2003, algo que confirmó las pésimas condiciones físicas del jamaicano, quien llegó a la competencia con un 9.95 como mejor marca, muy pobre para su talento natural.
La salida me mató. Normalmente mejoro con el pasar de las rondas, pero eso no llegó. Eso explica por qué perdí
, fue el único comentario del velocista tras la prueba, al tiempo que agradeció el apoyo en su última carrera: Fue hermoso, sabía que el público me apoyaría
.
De cualquier manera, Bolt atesora 14 medallas en Mundiales (11-2-1) y es el máximo ganador de preseas, empatado con su conacional Marlene Ottey, también velocista.
Si como todos esperan, lograra sacar algún metal de la pista en el relevo 4x100, se convertiría en el ser humano con más trofeos en estos certámenes mundiales.
La leyenda de Bolt jamás será empañada por esta derrota en el estadio Olímpico Reina Isabel. Mucho menos si se recuerda el 9.58 de 2009, registro que perdurará por años en los libros de récords, y a su soberbio historial en las pruebas de velocidad pura, siempre inmaculado en los controles antidopaje.
En tanto surge otro sobrenatural, Gatlin podrá saborear su título mundial de 2017, aunque siempre será visto como el gran villano de la película, el inigualable Dark Vader.
A todas estas ya muchos se preguntan si Bolt se retirará de las pistas después de este resultado o recapacitará y volverá al ruedo con nuevos bríos.
La de Gatlin fue la primera medalla de oro para Estados Unidos en el certamen, amén de haber recuperado el trono de los 100 metros después de 10 años de sequía. La última vez que ganaron databa de Osaka 2007, cuando Tyson Gay subió a lo más alto del podio.
Por lo que toca a la participación de mexicanos, se quedaron en ese concepto. Margarita Hernández se ubicó en el sitio 29 de la final directa de 10 mil metros, donde la ganadora fue la etíope Almaz Ayana, mientras que Jesús Tonatiu López quedó eliminado en la primera ronda de los 800 metros.
La mexiquense Hernández cronometró 33.06.53 minutos en la prueba que la etíope Ayana, monarca olímpica en Río 2016, resolvió en 30.16.32 para quedarse con el oro. La plata quedó en poder de su compatriota Tirunesh Dibaba (31.02.69) y el bronce fue para la keniata Agnes Jebt Tirop (31.03.50).
Mientras, el sonorense Tonatiu López se quedó en el sexto sitio del heat dos eliminatorio de 800 metros, con registro de 1.46.71 minutos, con lo que quedó marginado de la semifinal, para terminar en el sitio 22 general entre 49 competidores.
López, reciente bronce mundial Sub-18, no pudo bajar el récord mexicano de 1.45.51 minutos que él mismo estableció el 25 de marzo pasado en Culiacán.
Gudzius, nuevo monarca en lanzamiento de bala
El lituano Andrius Gudzius conquistó el título mundial en lan- zamiento del disco, con marca personal de 69.21 metros, para sorprender al principal favorito, el sueco Daniel Stahl (69.19). El lituano, quien se adjudicó la presea de oro con su segundo envío, quedó escoltado en el podio por Stahl y el estadunidense Manson Finley.
El sudafricano Luvo Manyonga se coronó en el salto largo con una estirada de 8.48 metros.
Con ese triunfo, el también subcampeón olímpico demostró que no fue casual el haber estampado en abril pasado la mejor marca de la temporada (8.65), aunque tuvo un gran rival en el estadunidense Jarrion Lawson, quien estuvo a punto de arrebatarle el triunfo en su último salto, al fijar los pinchos en 8.44, su máximo registro en la campaña.
La tercera posición le correspondió al también sudafricano Ruswahl Samaai (8.32), mientras el cubano Maykel Massó (8.26) resultó el mejor exponente latinoamericano al ubicarse en la quinta plaza, detrás del ruso Aleksandr Menkov (8.27), quien compite bajo bandera neutral.
Este domingo será la tercera jornada del Mundial de Londres con cinco finales planificadas: el maratón en ambos sexos, donde Ricardo Ramos será el único representante mexicano, salto con pértiga femenil, lanzamiento de la bala varonil y 100 metros femenil.