Viernes 4 de agosto de 2017, p. 20
Houston.
La petrolera estatal venezolana PDVSA recortó las ventas de crudo a su unidad refinadora en Estados Unidos, Citgo Petroleum, mientras aumenta el suministro a la rusa Rosneft, conforme a un plan firmado en mayo para ponerse al día con envíos atrasados, según documentos, fuentes de la firma y de sus empresas mixtas.
La producción de petróleo venezolano está en descenso desde 2012, declive que se aceleró este año en medio de bajas inversiones y retrasos en los pagos a proveedores. Casi todos los clientes de Petróleos de Venezuela reciben menos volúmenes, entre ellos Estados Unidos.
El plan de compensar a Rosneft por los envíos retrasados se debe a que buena parte del suministro petrolero de PDVSA a esa empresa está atado a préstamos concedidos al país sudamericano para ser pagados con crudo.
La deuda
El ministro del Petróleo de Venezuela, Nelson Martínez, informó en junio en un foro en San Petersburgo que Rosneft recibiría unos 70 mil barriles por día (bpd) como pago por un préstamo de mil 500 millones de dólares concedido a PDVSA en 2016. No reveló detalles del nuevo acuerdo de suministro.
Días después, Rusia hizo pública la renegociación de los préstamos bilaterales a Venezuela, país que es miembro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo. La Cámara de Auditoría de Rusia anunció que los ingresos del Estado proyectados para 2017 se reducirán en cerca de mil millones de dólares para reflejar las expectativas de que Venezuela podría no realizar los pagos a tiempo.
Desde mayo, el acuerdo de remediación
con Rosneft ha implicado un suministro extra de entre 63 mil y 105 mil bpd de crudo diluido venezolano, según un documento de PDVSA. El acuerdo está ligado al refinanciamiento de la deuda. La idea es ponernos al día para reducir la cantidad de cargamentos pendientes (para repagar la deuda)
, confió una fuente de la petrolera.
Rosneft y Citgo no contestaron de inmediato a solicitudes de comentarios.
La empresa rusa ha prestado entre 4 mil millones y 5 mil millones de dólares a Venezuela en los años recientes, sobre todo para ser repagados en petróleo.
Si PDVSA continúa destinando una porción creciente de sus constreñidas exportaciones petroleras a Rosneft, habrá menos barriles disponibles para ser enviados a otros clientes.