Más de 500 licitaciones realiza el Seguro Social cada año para insumos y obras
Viernes 21 de julio de 2017, p. 32
Más de 500 licitaciones para la adquisición de insumos y realización de obras públicas se realizan cada año en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a nivel central, en cada una de las cuales se tomarán medidas para impulsar la transparencia, competencia y mejores condiciones de compra. En los procesos donde esto se ha hecho, el organismo ahorrará –entre 2013 y 2020–, 16 mil 753 millones de pesos, aseguró Patricio Caso, director de Administración.
Ayer, el funcionario presentó la estrategia para impulsar la competencia en compras públicas, la cual también prevé la selección de licitaciones relevantes, sobre las que habrá la mayor difusión y participación de empresas y medios de comunicación desde la publicación de las prebases hasta el fallo final.
Hasta ahora se han identificado 13 concursos de este tipo que se desarrollarán durante lo que resta del año y en los que el IMSS invertirá 60 mil 185 millones de pesos. Entre ellos están las compras consolidadas de medicamentos, material de curación y vacunas por 53 mil 75 millones de pesos; de equipamiento de sustitución por 2 mil 105 millones de pesos; la contratación de servicios de aceleradores lineales por dos mil millones; y servicio integral de laboratorio para pruebas in situ en la región noreste, con un costo de 120 millones de pesos.
También las licitaciones para la construcción de dos hospitales generales en el estado de México, una Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) en Monterrey y dos Unidades de Medicina Familiar en Zacatecas y Mérida, donde la inversión ascenderá a mil 150.90 millones de pesos.
Se consideran licitaciones relevantes aquellas que tienen un impacto social por el tipo de bien o servicio a adquirir o rentar (como las medicinas o los servicios de seguridad); si implica cambios del proceso respecto de los anteriores y si su costo es superior a 500 millones de pesos. Además se incluirá a este modelo, otras 10 licitaciones cuyo valor sea mayor a 50 millones de pesos.
Caso explicó que esta nueva estrategia, atiende las recomendaciones que en 2012 hizo la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) para mejorar los procesos de adquisiciones y abatir la corrupción.
La fórmula está en la transparencia. Mientras esta sea mayor, se favorece el interés de las empresas para participar en las licitaciones y eso a su vez genera competencia y la posibilidad de mejores ofertas para el IMSS indicó en la conferencia de prensa, donde también participaron representantes de los sectores obrero y patronal; Jacobo Pastor García Villarreal de la OCDE, Antonio Mazzitelli, representante de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudd) en México; y el subsecretario de la Función Pública, Javier Vargas.
El director de Administración del IMSS aseguró que el programa también se aplicará en las licitaciones que organizan las delegaciones y las 25 UMAES. Respecto de estas últimas, admitió que si bien son autónomas respecto de las delegaciones, normativamente dependen y rinden cuentas a la dirección general del instituto, por lo que están obligadas a la transparencia y rendición de cuentas.
Bajo el nuevo esquema para llevar a cabo las compras públicas, el IMSS prevé que en todas las licitaciones se cumpla con cuatro líneas de acción: que los contratos serán plurianuales; aumentar las internacionales; convocar por regiones de manera estratégica a fin de terminar con inercias en la proveeduría; y continuar la migración de modelos de compra hacia el arrendamiento de bienes y servicios.
En todos los casos se garantizará la presencia del testigo social que designa la Secretaría de la Función Pública y otros actores externos como la OCDE, Onudd y organizaciones de la sociedad civil.