Filadelfia.

Un autogol de Aníbal Godoy le permitió a Costa Rica convertirse en el primer semifinalista de la Copa Oro 2017 al vencer 1-0 a Panamá en un duelo deslucido que cayó por varios instantes en el sopor.

Ambas escuadras dejaron al descubierto sus carencias en la técnica del balompié, incluso parecía que el duelo terminaría en ceros cuando el volante panameño Aníbal Godoy falló al desviar el balón y anotó en propia puerta un gol que le dio la trascendental victoria a los costarricenses.

El duelo comenzó flojo ante una escasa asistencia en el Lincoln Financial Field. Mientras en la cancha Panamá y Costa Rica daban un pesaroso espectáculo, las gradas lucían grises y sin ambiente por parte de los seguidores.

En la mayor parte del primer tiempo el balón permaneció trabado en el medio campo, pero no porque existiera una aguerrida pelea entre los equipos, sino por la falta de pericia futbolística.

Las fallas en los pases y retención del esférico eran constantes entre ambas escuadras. Costa Rica se mostraba más desequilibrada y en la primera parte del encuentro sólo se acercó a la meta adversaria con un tiro de esquina que atajó el arquero de Panamá.

Los caneleros generaron más jugadas de peligro. Miguel Camargo fue el primero en atacar con un disparo por el sector derecho, pero el guardameta tico Patrick Pemberton atajó el balón.

Gabriel Torres puso en peligro la meta de Costa Rica en dos ocasiones, pero en el primer tiro el esférico salió desviado y en el segundo pegó contra el arco. Camargo se acercó de nueva cuenta a la red de los costarricenses, pero el remate falló en la dirección.

Después de los primeros 30 minutos, el partido se concentró en el medio campo. Ambos intentaban llegar al área del adversario, pero perdían el balón cuando comenzaban el ataque.

Aunque Panamá no desplegó una extraordinaria defensa, incluso llegaba a dejar espacios, Costa Rica no lograban mantener la posesión del esférico. Los caneleros recurrían a todo tipo de artimañanas, entre ellas jaloneos, para impedir los ataques.

Al regreso del vestidor, Costa Rica despertó en la cancha y comenzó a proponer juego. Giancarlo González estuvo cerca de abrir el marcador al rematar con la cabeza un tiro de esquina.

Después, Bryan Ruíz se animó a lanzar un potente disparo desde fuera del área, aunque la suerte no lo acompañó y el balón fue atrapado por el arquero. Casi enseguida David Guzmán también disparó contra la red sin lograr la anotación.

En una jugada de peligro, lo ticos se filtraron por el carril derecho, Ruíz recibió un pase cuando se encontraba en el área y disparó, pero el guardameta José Calderón no se intimidó y rechazó el balón.

El juego de nueva cuenta se encerró en el centro de la cancha. Mientras los jugadores intentaban escapar al área del adversario, el estratega de Panamá, Hernán Bolillo Gómez, se acercó a conversar amistosa y tranquilamente con el cuerpo técnico de Costa Rica.

En un momento de inspiración, Panamá atacó por la banda izquierda, donde Gabriel Torres disparó con potencia, parecía que el balón entraría a la red, pero se atravesó Patrick Pemberton y desvió la trayectoria.

Un error de los caneleros permitió a Costa Rica abrir el marcador al minuto 78, cuando Aníbal Godoy anotó un autogol al intentar desviar un tiro de esquina que culminó con el balón dentro de su propia red.

Mientras Godoy lamentaba la fatal falla, los ticos se lanzaron al festejo, habían hecho poco en el terreno de juego pero tenían la ventaja necesaria para avanzar a la siguiente fase.

Panamá perdió fuerza al tiempo que los costarricenses defendieron el triunfo e incluso se acercaron de nueva cuenta con disparos de Ulises Segura y José Valtierra.