Entre los 100 mejores ajedrecista del mundo sólo hay una mujer: la china Hou Yifan, joven que con sólo 23 años de edad es la campeona del orbe en la categoría femenil e hizo sufrir en una partida al monarca absoluto, el noruego Magnus Carlsen.

Quiero ser la primera campeona mundial mujer. Creo que el tema de género no importa. Deseo ser la primera en dar ese paso, por eso trabajo fuerte para lograrlo y ser parte de los mejores para trascender en el ajedrez, asevera la joven en entrevista con La Jornada, tras una gira que realizó a México.

Yifan –82 del ranking mundial– sorprendió en 2008 cuando se convirtió en la mujer más joven en recibir el título de Gran Maestro de ajedrez con tan sólo 14 años y 7 meses de edad. Además es la tercera fémina en superar los 2 mil 600 puntos ELO de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE, por sus siglas en francés) después de la emblemática húngara Judit Polgar y la hindú Humpy Koneru.

Considerada una niña prodigio en este deporte, las comparaciones entre Yifan y Polgar, la única mujer que ha estado entre los 10 mejores ajedrecistas del mundo, han sido inevitables. No obstante, la joven china deja claro que quiere forjar su propia historia en los tableros.

Son diferentes generaciones y son diferentes las personas a las que enfrentamos. Cada persona es única y no puedes comparar. No podría decir que juego como Judit, porque ella estuvo en diferentes condiciones. Cada una de nosotras estamos en nuestro tiempo. Polgar hizo lo que tenía que hacer y yo haré lo que me corresponde, expresa Yifan.

Los ojos oscuros de Yifan miran el tablero de cuadros con las piezas de batalla como si estuviera encantada. Antes de cada movimiento analiza con detenimiento las consecuencias, de pronto sonríe y mueve una de las piezas. Su rostro aún presenta rasgos dulces, pero en cada partida sus gestos revelan una madurez superior a su edad.

La monarca femenil puso bajo tensión al campeón mundial Magnus Carlsen al entablar con él en abril en el torneo de Grenke, uno de los certámenes con más prestigio, en una partida donde el noruego tuvo que salir al paso para evitar la derrota.

Después de jugar con Carlsen me sentí contenta, pero no satisfecha. Cuando terminó el juego, Carlsten me dijo que se sintió incómodo al jugar conmigo y que yo debí ganar, dice sin pretensiones.

En el caso del ajedrez no importa el género, todo tiene que ver con la calidad del entrenamiento, afirma Yifan, quien se ha mostrado como una defensora de la igualdad de géneros.

Yifan llevó a cabo una gira la semana pasada en México, donde impartió conferencias y talleres. La joven china vino tras recibir una invitación de la Federación Nacional de Ajedrez, que solicitó ayuda a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte para cubrir los gastos.