Los 325 mil 403 egresados de secundaria que este fin de semana se presentaron al concurso de colocación para estudiar el bachillerato tienen garantizado un lugar dentro de las opciones elegidas, aseguró la Comisión Metropolitana de Instituciones Públicas de Educación Media Superior (Comipems).

Javier Olmedo Badía, vocero de la comisión, informó que para este año el número de aspirantes se redujo en 6 mil dos (2.8 por ciento), respecto de 2016, cuando se contaron 331 mil 405.

En conferencia de prensa, señaló que los planteles de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) –preparatoria y Colegio de Ciencias y Humanidades– fueron nuevamente los más solicitados en el concurso, con 57.1 por ciento, seguidos de los bachilleratos del estado de México y del Instituto Politécnico Nacional (IPN), con 15.4 y 13.8 por ciento, respectivamente.

Resultados, en agosto

Este sábado y domingo los jóvenes registrados presentaron las evaluaciones que les permitirán quedarse en uno de los 463 planteles de instituciones de educación media superior ubicadas en la zona metropolitana de Ciudad de México, como el Colegio de Bachilleres, el Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica, las instituciones del IPN, de la Secretaría de Educación del estado de México, de la Universidad Autónoma del estado de México y de la UNAM. Los resultados se darán a conocer en la gaceta electrónica de Comipems el 5 de agosto.

El funcionario informó que el año pasado una tercera parte de los aspirantes que hizo el examen se quedó en el plantel que eligió como primera opción y que a 68.5 por ciento le fue asignada una de las cinco primeras elecciones, situación que, agregó, seguramente se presentará en esta edición del concurso.

Estimó que como en años anteriores, en esta ocasión también podrían ser alrededor de 10 mil aspirantes (3 por ciento aproximadamente) que no se presentaron al concurso por diversas razones, como optar por una institución privada. Otro número similar podría quedar sin espacio por carecer de certificado de secundaria.

Por ello, previó que el número de lugares a distribuir en 2017 serían unos 300 mil 496. Esto nos da la certeza de tener la capacidad de garantizar un espacio para todos los jóvenes que quieren continuar sus estudios en el nivel medio superior, dijo.

Olmedo aclaró que el examen no es de selección, sino de distribución, porque todos los aspirantes tienen garantizado un lugar. La prueba consta de 128 reactivos y está diseñada con cierto grado de dificultad para lograr una dispersión de calificaciones, lo que permite una asignación diferenciada.

El examen, dijo, está hecho para obtener una media de 50 por ciento de aciertos, cifra que se ha mantenido y que según el puntaje más alto logrado los aspirantes tienen más oportunidad de que se les asigne su primera o segunda opciones. El sábado presentaron el examen 92 mil 948 estudiantes, cuya primera opción fueron planteles de la UNAM, mientras el domingo 232 mil 455 hicieron la prueba en los turnos matutino y vespertino. Estos últimos fueron los que solicitaron como primera opción algunas de las otras nueve instituciones de la Comipems.