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26 aniversario luctuoso del artista

El propietario actual mostró el instrumento en La Jornada

Cuidan como un tesoro la guitarra de Tamayo; la obsequió a una persona
Foto
Guitarra de Rufino Tamayo (1899-1991) con la que amenizó numerosas tertulias; se encuentra en algún lugar de la Ciudad de México, expresó a La Jornada un emisario del propietario del instrumento, que tiene la firma del pintor inscrita debajo del puente (a la derecha de esta imagen)Foto José Carlo González
 
Periódico La Jornada
Sábado 24 de junio de 2017, p. 3

Si la pintura no hubiera atrapado al joven Rufino Tamayo, seguramente se habría dedicado a la música, su segundo gran amor dentro del arte. Hoy la guitarra que le perteneció y con la que amenizó numerosas tertulias con amigos, es cuidada como un tesoro por una persona que tuvo el privilegio de recibirla de manos del propio maestro como un obsequio.

El instrumento tiene la firma de Tamayo y se conserva en el mismo estuche, ya gastado, donde la tuvo el pintor. El propietario actual, quien pidió omitir su nombre, la mostró a La Jornada para compartir el recuerdo en el 26 aniversario luctuoso del artista.

No sabemos si tenga algún valor, pero la querida guitarra de Tamayo, que alguna o muchas veces tocó, está bien cuidada, intacta, en algún lugar de la Ciudad de México, señaló un emisario del propietario.

Añadió que si bien consideran que el instrumento debería estar en Oaxaca o exhibirse en su museo en Chapultepec, por el momento no hay planes ni proyectos para deshacerse de ella.

La vocación musical de Tamayo quedó plasmada en varias de sus obras, algunas de las cuales se exhiben en la gran retrospectiva que estos días acoge el Museo de Arte Moderno (MAM).

También hay que recordar que la esposa de Tamayo, Olga, fue pianista. Ambos se conocieron en el Conservatorio Nacional de Música, donde ella estudiaba y él estaba pintando un mural, recordó Sylvia Navarrete, directora del MAM; es por ello que a Rufino le gustaba tanto retratar instrumentos musicales, en particular guitarras, sus favoritas.