La medida que impulsó Obama nunca se implementó porque la vetaron en 26 estados
Sábado 17 de junio de 2017, p. 21
Washington.
El presidente estadunidense, Donald Trump, anunció este viernes la cancelación de la política impulsada por su antecesor, Barack Obama, para permitir a millones de inmigrantes indocumentados, padres de niños nacidos en Estados Unidos, permanecer en el país. Esta política de 2014, conocida como Acción Diferida para Padres de Estadunidenses y Residentes Permanentes Legales (DAPA, por sus siglas en inglés).
El Departamento de Seguridad Interior anunció que suspenderá la DAPA con el apoyo del de Justicia. El secretario de Seguridad Interior, John Kelly, aseguró que no hay un camino verosímil en el futuro para litigar contra la actual política prohibicionista
. La DAPA nunca se implementó luego de que 26 estados presentaron con éxito una demanda en una corte federal de Texas para vetarla, fallo que mantuvo la Suprema Corte tras una apretada votación.
La DAPA pudo haber beneficiado a unos 4 millones de indocumentados con hijos nacidos en Estados Unidos que se encontraban en el país desde antes de 2010, no obstante, se mantiene la política de 2012 de Obama conocida como Acción Diferida para Ingreso de Menores (DACA por sus siglas en inglés), que permite a las personas que ingresaron al país ilegalmente siendo niños, a permanecer y estudiar o trabajar con permisos renovables cada dos años.
Kelly no precisó si el gobierno tiene intención de remplazar la DAPA por otra medida que permita a las familias que viven en el país desde hace décadas mantenerse unidas y eludir la deportación. La iniciativa tiene lugar en medio de una dura ofensiva contra la inmigración indocumentada ordenada por Trump, quien prometió durante la campaña electoral expulsar a la mayoría de los 11 millones de personas que viven sin documentos en Estados Unidos, a pesar de que muchas de ellas están instaladas en el país desde hace años, tienen empleo estable y formaron una familia.
Trump ha expresado repetidamente tener cierta empatía
con los dreamers. En una entrevista para la agencia de noticias Ap en abril, aseguró que su gobierno “no está detrás de los dreamers. Estamos detrás de los criminales, así que deben estar tranquilos”.