La actualización de los estándares y la verificación de las fuentes industriales de emisiones de contaminantes son un gran pendiente para mejorar la calidad del aire; tan sólo en los programas anuales de medio ambiente cada año se observa que no se abordan esos temas, sostuvo Anaid Velasco, del Centro Mexicano de Derecho Ambiental.

En el plan de trabajo de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) de 2017, en calidad del aire, sólo se consideran medidas dirigidas a los vehículos, ninguna para la industria. El titular de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came), Martín Gutiérrez Lacayo, planteó el martes ante diputados que hay cuatro empresas que generan poco más de la cuarta parte de las emisiones de contaminantes al aire.

Desde el año pasado, un grupo de expertos de la Iniciativa climática de México, del Instituto para el Desarrollo de Políticas de Transporte, entre otras asociaciones, hicieron varias propuestas relacionadas con la industria que las autoridades no han considerado. Plantearon emitir de forma urgente la Norma 043, que define los niveles máximos permisibles de emisión a la atmósfera de partículas sólidas provenientes de fuentes fijas.

También propusieron desarrollar una ley emergente que establezca niveles máximos permisibles de emisiones de compuestos orgánicos en procesos y actividades industriales. Asimismo, acelerar acciones de reducción de emisiones en el corre-dor Tula-Vito-Apasco-Tepeji, así como en las delegaciones y municipios de mayor concentración de industria.

Velasco agregó que otro pendiente es la Norma Oficial Mexicana de combustibles limpios que se empezó a trabajar el año pasado y a petición de varios grupos se volvió a abrir el análisis. Hay que poner atención en este tema para que la calidad de combustibles no responda sólo a cuestiones económicas, sino a la salud de los habitantes, aunque se aplica a nivel federal, apuntó Velasco.

También está pendiente la actualización de la Norma Oficial Mexicana 044 de vehículos pesados, se ha pedido a la industria que pase a estándares más modernos en cuanto a tecnología que justamente inciden en mejorar la calidad del aire, pero aún está detenido, se percibe resistencia a sacarla con estándares más altos.

En el programa anual de trabajo 2017, en el tema de contaminación del aire, la dependencia apunta que la meta para este año será gestionar la implementación de acciones estratégicas, sin hacer referencia al sector industrial. Se plantean para el 2018 temas sólo relacionados con los vehículos.