Año y medio después del inicio del programa Escuelas al Cien, al que a la fecha se han destinado 25 mil millones de pesos –5 mil 500 millones en proceso de inversión–, el Instituto Nacioal de la Infraestructura Física Educativa (Inifed) y la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) realizarán una evaluación para medir el impacto de las mejoras en el aprendizaje de los alumnos y definir cuáles son los indicadores correctos, afirmó Héctor Gutiérrez de la Garza, director general del instituto.

Entrevistado en el contexto de la inauguración del Foro internacional sobre infraestructura escolar, convocado por ambos organismos, destacó que Escuelas al Cien sólo se puede aplicar en planteles donde se cuenta con la seguridad de que existe una propiedad o tenencia de la tierra por el Estado.

Explicó que en el caso de terrenos ejidales se debe contar por lo menos con la inscripción de tenencia de la tierra en el Registro Agrario Nacional. Lo hicimos así para poder intervenir de inmediato en los planteles educativos. De otra manera, iba a ser muy lento el proceso si se exigían las escrituras.

Enfatizó que no se puede invertir recurso público alguno cuando se trata de terrenos particulares, incluso si se trata de planteles del Consejo Nacional de Fomento Educativo, que atiende a la población escolar más pobre del país.

Gutiérrez de la Garza indicó que la Unesco y el Inifed colaborarán en un proyecto de un año para definir indicadores internacionales y examinar el impacto de Escuelas al Cien.

Tenemos que evaluar con parámetros internacionales si la inversión y esos componentes a los que hacemos mención dentro de los programas de mejora educativa, son los idóneos, aseguró.

Destacó que expertos internacionales visitarán 15 planteles en zonas rurales, índigenas y urbanas para definir el impacto del programa y definir si es o no adecuada la apliación de los recursos.