Miércoles 14 de junio de 2017, p. 2
Washington/Münster.
El gigante gaseoso Júpiter no es sólo el planeta más grande, sino también el más antiguo del sistema solar, según publicaron investigadores de la Universidad de Münster en la revista científica Proceedings de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos.
Según este estudio, Júpiter ya se había creado cuatro millones de años después de la formación del sistema solar, mientras la Tierra necesitó cerca de cien millones de años. De acuerdo con la universidad alemana, por primera vez se ha conseguido determinar la edad del planeta, ya que hasta ahora sólo había estimaciones.
Es complicado fijar la edad de Júpiter debido a que se trata de un planeta gaseoso y por ello, a diferencia de otros, como Marte, no se puede tomar una muestra de roca para medir la edad. Si bien se han presentado modelos teóricos sobre que debió formarse rápidamente, esos pronósticos eran muy inexactos
, explicó Thomas Kruijer, que entretanto trabaja en el Laboratorio Nacional Lawrence Livermore en Estados Unidos.
Análisis de meteoritos
Los expertos alemanes usaron una vía indirecta: analizaron meteoritos que procedían del cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter. Los asteroides se formaron entre uno y cuatro millones después de la creación del sistema solar, que tiene cerca de 4 mil 600 millones de años. El análisis exhaustivo de la composición química de los meteoritos muestra que algunos se formaron dentro de la órbita de Júpiter, pero otros sorprendentemente fuera de ella.
Esto significa que durante su formación no se produjo ninguna mezcla de material de las dos zonas. Para impedir esto de manera efectiva, el joven Júpiter debía tener ya una masa 20 veces mayor a la de la Tierra actual cuando había transcurrido tan sólo un millón de años, apuntan los astrónomos.
Después de otros tres millones de años, alcanzó 50 veces la masa de la Tierra. A partir de entonces, Júpiter alcanzó muy rápido su masa definitiva, 384 veces mayor que la de Tierra.