Viernes 26 de mayo de 2017, p. 36
Una gran cantidad de habitantes de zonas rurales es víctima de malas prácticas médicas en el Seguro Popular, como resultado de la asignación de pasantes para atenderlos, además de la escasez de materiales curativos, advirtió la Unidad de la Fuerza Indígena y Campesina (UFIC).
Rocío Miranda Pérez, que preside dicha organización, afirmó que una muestra clara de las fallas del sistema de seguridad social en el campo son los casos de atención tardía en partos, muchos de los cuales han derivado en la muerte de recién nacidos y madres, principalmente en Oaxaca, Chiapas o Guerrero.
La dirigente campesina exigió al secretario de Salud, José Narro Robles, que haga una revisión del funcionamiento del Seguro Popular y depure su plantilla de médicos y enfermeras, ya que al designar a personal poco capacitado se cometen múltiples casos de iatrogenia, es decir, actos médicos dañinos que perjudican a los pacientes.
La dirigente de la UFIC solicitó a Narro que garantice una infraestructura digna y de fácil acceso en las comunidades rurales, ya que la falta de medicinas en los centros de salud, así como de doctores y enfermeras se ha vuelto una constante.
Un ejemplo, indicó, ocurrió el pasado 20 de mayo en el municipio de La Barca, Jalisco, donde un campesino enfermo de una hernia murió a causa de mala atención médica, además de la falta de anestesia y otros implementos básicos de curación.