Aunque aún no ha dado inicio el proceso electoral de 2018, en el PAN los liderazgos políticos y las corrientes ya empezaron a definirse en favor de los panistas interesados en la candidatura a la Presidencia de la República.

El tema es relevante, ya que uno de los métodos para definir al abanderado es la realización de una elección con participación de la militancia. Entre quienes hasta ahora han logrado mayor apoyo se encuentran Ricardo Anaya, dirigente del partido; Margarita Zavala, esposa del ex presidente Felipe Calderón, y Rafael Moreno Valle, ex gobernador de Puebla.

Según integrantes de Acción Nacional, Anaya ha construido una amplia red de respaldo en la que se encuentran los mandatarios de Veracruz, Miguel Ángel Yunes, y de Baja California, Francisco Vega, así como los coordinadores parlamentarios en el Senado y en la Cámara de Diputados, Fernando Herrera y Marko Cortés, respectivamente; el ex secretario de Gobernación Santiago Creel y el ex gobernador de Morelos e integrante de la ultraderecha Marco Adame. De igual manera, están alcaldes de municipios relevantes, como los de Naucalpan y Huixquilucan, dirigentes estatales y de grupos, además de operadores políticos, como Jorge Manzanera y Jorge Romero, este último líder de la corriente que domina el PAN en la Ciudad de México.

Margarita Zavala ha logrado el respaldo de ex gobernadores como Alberto Cárdenas, de Jalisco; José Guadalupe Osuna, de Baja California, y Fernando Canales, de Nuevo León. Igualmente, cuenta con senadores y panistas que formaron parte del gobierno de su esposo, entre los que destacan Roberto Gil y Ernesto Cordero. De la ultraderecha tiene entre sus filas a José Luis Luege. Sin embargo, son pocos los dirigentes estatales y de expresiones a su lado. Eso sí, posee la simpatía de panistas independientes.

Moreno Valle tiene el apoyo de gran parte del PAN poblano y de controvertidos liderazgos, como el de Fernando Larrazábal, ex edil de Monterrey, y Ulises Ramírez, uno de los dirigentes mexiquenses más poderosos. Asimismo, está el ex diputado federal Luis Alberto Villarreal, famoso por el escándalo de los moches. También tiene simpatizantes en Guerrero, Hidalgo y Tlaxcala, aseguran militantes consultados.

Respecto de Juan Carlos Romero Hicks y Ernesto Ruffo, quienes también han manifestado su intención de buscar la candidatura presidencial del PAN, se afirma en los corrillos blanquiazules que podrían captar la simpatía de quienes no responden a ningún grupo interno.