El debate creció con el llamado de AMLO a PT, MC y sol azteca a sumarse a su partido
Corrientes perredistas advierten que las coaliciones con el blanquiazul no los han beneficiado
por la política nacional que México necesitaFoto María Severiano
Domingo 14 de mayo de 2017, p. 12
Con fuertes pugnas internas y conscientes de la cerrada contienda que se avecina con Morena, liderazgos de los partidos de la Revolución Democrática (PRD) y de Acción Nacional (PAN) abrieron la posibilidad de aliarse en 2018 a partir de la creación de un frente amplio.
A principios de mes, el debate sobre el tema empezó a cobrar fuerza entre los perredistas luego de que el dirigente nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador, planteó una probable coalición con el sol azteca, PT y Movimiento Ciudadano para las elecciones del próximo año, si sus candidatos declinaban por los de su partido para los comicios de este 4 de junio.
En respuesta, corrientes del PRD, como Nueva Izquierda, Foro Nuevo Sol, Galileos e inclusive la presidenta del partido, Alejandra Barrales, se pronunciaron por la integración de un frente amplio para 2018, sin descartar al PAN, y no necesariamente llevando a un abanderado de este partido, sino uno independiente, con un programa democrático y la intención de establecer un gobierno de coalición.
Contra esta posición, otras expresiones del PRD apuestan porque las alianzas sean sólo con la izquierda y las fuerzas progresistas. De hecho, grupos como Izquierda Democrática Nacional y Patria Digna han cuestionado la estrategia seguida en los años recientes por la dirigencia perredista de coaligarse con Acción Nacional en comicios locales, pues consideran que sólo el blanquiazul ha salido fortalecido, mientras el sol azteca ha sufrido descalabros tanto en votación como en espacios de representación, en fallidos gobiernos de coalición.
Un ejemplo de ello fue lo sucedido con la alianza en Quintana Roo, donde el PRD perdió casi la mitad de su porcentaje de votación, al pasar del 15.8 por ciento obtenido en 2013, a 8.3, y sólo consiguió un cargo en el gabinete del gobernador Carlos Joaquín. En contrapartida, el PAN aumentó de 11.2 a 28.1 por ciento el número de sufragios en su favor.
Consultado sobre la posibilidad de aliarse con el PRD o de ser parte de un frente amplio opositor o democrático, Fernando Rodríguez Doval, vocero del blanquiazul, recordó que las coaliciones con el perredismo han sido exitosas y se han traducido en programas de gobierno.
Si bien en estos momentos el PAN está concentrado en los procesos electorales en curso, dijo que está abierto a analizar escenarios, partiendo de la premisa de que el PRI se tiene que ir de Los Pinos.
Una vez que pasen las elecciones del 4 de junio en los estados de México, Coahuila, Nayarit y Veracruz, se empezarán a revisar las condiciones rumbo a 2018. El PAN siempre estará dispuesto a escuchar a quienes propongan estrategias efectivas para sacar al tricolor, puntualizó.
Según diversos analistas, las coaliciones electorales han permitido el PRD la sobrevivencia política en algunos estados y, en otros, hacer gobierno al PAN, inclusive en localidades donde nunca habían ganado. En la actual discusión, los perredistas han sumado el ingrediente de poder llevar a un candidato ciudadano, situación que en Acción Nacional se ve difícil que las corrientes acepten.
La idea de una alianza entre ambos institutos políticos, que proponen algunos del PRD y no ven mal los panistas, no sólo tendría el objetivo de sacar al PRI del gobierno federal, sino también enfrentar en mejores condiciones al dirigente de Morena, quien aparece en primer lugar en las preferencias electorales.