En el inicio de la negociación para definir el incremento salarial de los burócratas del país, que se prevé será mayor a 5 por ciento, la Secretaría de Hacienda y la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (Fstse) acordaron continuar con la formalización de 66 mil 200 plazas, regularizar los pagos y aportaciones al Pensionissste además del adeudo al Fovissste de las 32 entidades federativas.

También convinieron iniciar este mismo año la construcción de vivienda para servidores públicos en 71 predios de Ciudad de México, y sacar a las Sofoles (Sociedades Financieras de Objeto Limitado) del Pensionissste, indicó el dirigente de la Fstse, Joel Ayala Almeida.

En conferencia de prensa puntualizó que prácticamente todos los gobiernos estatales tienen adeudos con el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), el Pensionissste y el Fovissste, ya que han retenido las respectivas aportaciones de los trabajadores, pero no las entregan a estas instituciones.

El también senador expuso que las irregularidades en la entrega de estas aportaciones a los organismos han sido denunciadas desde hace tiempo y se ha pedido y reconvenido a los gobiernos estatales que entreguen los recursos que les descuentan a los trabajadores, pero no se ha logrado nada. Por ello, ahora se pasó a una exigencia y se pactó con las autoridades hacendarias un convenio para regularizar esta situación.

Hizo ver que un segundo acuerdo inicial alcanzado con la secretaría que preside José Antonio Meade, es sacar a todos los organismos, como Sofoles y otros terceros, del Fovissste, ya que lo sangran. Esta institución tiene capacidad para prestar a los trabajadores y no requiere de estos pulpos financieros que sólo la dañan, dijo.

Ayala Almeida añadió también que es fundamental la formalización de empleados en el gobierno, ya que, por ejemplo, 60 por ciento de los trabajadores que laboran en esta ciudad no tienen seguridad social ni estabilidad, incluso algunos laboran a lista de raya y son informales, lo que es inaceptable.

También se refirió a que el incremento para los más de 1.3 millones de burócratas no puede ser menor al 5 por ciento conseguido el año pasado y dijo que el salario mínimo es un insulto para los trabajadores, pues significa 2 mil 400 pesos al mes, y calificó como insuficiente el aumento a 92 pesos para este salario que propone el jefe de Gobierno capitalino.