El Partido Revolucionario Institucional (PRI) presentó una denuncia contra la candidata de Morena a la gubernatura del estado de México, Delfina Gómez Álvarez, para que el Instituto Nacional Electoral (INE) sume a sus gastos de campaña lo erogado en 141 eventos realizados como promotora de la soberanía nacional.

También pidió a la Unidad Técnica de Fiscalización que cuantifique esos gastos e investigue su procedencia, ya que podrían ser del municipio de Texcoco, el cual gobernó la abanderada de Morena, de 2013 a 2015.

En la sede nacional del INE, el representante del tricolor insistió en que hay posibilidades de que la candidata rebase topes de gastos de campaña, pero eludió hacer un cálculo: No queremos caer en el engaño que nosotros registremos unos costos. Que sea el INE el que determine.

Afirmó que la candidata de oposición realizó actos anticipados de campaña desde que Andrés Manuel López Obrador la nombró promotora de la soberanía nacional.

Este cargo que no existe más que en el imaginario de quien lo otorga ofrece vía de hacer campaña fuera de los tiempos legales y de la supervisión o fiscalización legal indispensable del dinero con que se hacen estos actos, expuso en rueda de prensa.

Se preguntó quién pagó estos actos realizados del 11 de junio de 2015 a diciembre de 2017, y en los que se gastaron en templetes, baños móviles, banderas de morena, sombrillas, lonas, sillas, equipos de sonido, de video y arreglos florales, etcétera.

Según Ramírez Marín, el INE debe indagar los descuentos hechos a empleados de Texcoco y que fueron a parar a cuentas de particulares, pues de ahí podrían provenir los recursos usados en la campaña anticipada de Morena a la gubernatura del estado de México.

En tanto, Horacio Duarte Olivares, representante de Morena ante el INE, desestimó la queja al señalar que en el tricolor están desesperados y no saben por dónde ni cómo atacar.

Aclaró que el nombramiento de Gómez Álvarez en junio del año pasado tuvo como fin la consolidación de Morena en el estado de México como partido nuevo, que necesitaba consolidar su estructura y su militancia.

Señaló que esos actos obedecieron a esa lógica, y en ese mismo sentido va también el gasto realizado. Son actividades ordinarias de nuestro partido en el estado de México. Si al PRI le resulta muy difícil la idea de construir estructura desde abajo, a ras de suelo con la militancia, ese no es nuestro problema, explicó.