Bangkok.

Un tercio del crecimiento económico mundial este año responderá a la expansión del producto interno bruto (PIB) de China, que mantendrá su liderazgo internacional pese a reajustes, advirtió hoy el FMI.

A juicio del Fondo Monetario Internacional (FMI), el PIB del gigante asiático subirá 6.6 puntos porcentuales; es decir, reducirá el dinamismo de años recientes a consecuencia de la transición de una economía basada en la exportación y las inversiones a otra con énfasis en el consumo interno.

Pese a la desaceleración, el país seguirá al frente del crecimiento global, representando un tercio del total, indicó el organismo en un análisis sobre la región de Asia-Pacífico, presentado en Singapur.

De acuerdo con el reporte, el PIB chino aumentó 7.3 por ciento en 2014, 6.9 por ciento en 2015 y 6.7 en 2016, mientras las proyecciones con vistas al próximo bienio son de 6.6 puntos porcentuales para 2018 y de 6.2 en 2019.

A juicio de la institución, las transformaciones impulsadas por Pekín tendrán a corto plazo efectos negativos para la mayoría de las naciones exportadoras del área, entre ellas Malasia y Corea del Sur, pero a largo plazo serán beneficiosas, sobre todo para el turismo y la importación de bienes de consumo y servicios.

Entre las afectaciones, el texto incluyó la posible reducción de los precios de las materias primas, al prever contracciones de la demanda china, que actualmente representa 40 por ciento de las importaciones de metales y 10 por ciento de las adquisiciones de petróleo a escala global. Al igual que otros estados asiáticos, agregó el estudio, China está expuesta a diversos riesgos, como el envejecimiento de su población y la tendencia proteccionista de Estados Unidos.

La tensión incrementada y la incertidumbre en el clima de comercio mundial podría afectar negativamente las exportaciones de Asia a Estados Unidos, alertó el FMI. No obstante, valoró la fuente, la región Asia-Pacífico encabezará el crecimiento económico mundial, con 5.5 por ciento en 2017 y 5.4 en 2018.