El Cenart fue la sede del encuentro
Se montaron obras, hubo conversatorios y se impartieron clases magistrales
Domingo 26 de marzo de 2017, p. 6
La comunidad de la Escuela Nacional de Arte Teatral (ENAT) del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) celebró ayer el Día Mundial del Teatro en el Centro Nacional de las Artes (Cenart), con puestas en escena, mesas de análisis sobre la gestión y producción escénica, talleres y clases magistrales.
El festejo en torno al arte dramático se inauguró a las 10 horas con la lectura del mensaje del Día Mundial de Teatro, escrito por la actriz Isabelle Huppert, quien se refiere a esta disciplina como un arte vivo que desafía el espacio y el tiempo, porque las piezas más contemporáneas se nutren de los siglos pasados, los repertorios más antiguos se hacen modernos cada vez que son montados de nuevo.
La inauguración fue encabezada por el director del Cenart, Ricardo Calderón, y la directora de la ENAT, Gabriela Pérez Negrete.
Tras finalizar la ceremonia de apertura se realizó la primera mesa de análisis sobre gestión pública, la cual contó con la participación de Enrique Singer, director de la Compañía Nacional de Teatro; Alberto Lomnitz, coordinador nacional de Teatro del INBA, y Ángel Ancona, titular del Sistema de Teatros de la Ciudad de México.
Lomnitz consideró un acierto que sea la ENAT la que propicie el debate sobre diferentes temas de teatro y enfatizó la importancia que tiene crear una comunidad teatral con estudiantes, instituciones, artistas y creadores.
Mientras transcurría el debate entre los especialistas en el Foro Antonio López Mancera, en la explanada de la ENAT el grupo Quesillo Teatro escenificó la obra De pasos y ruedas, basada en los entremeses del español Lope de Rueda.
Conexión actor-espectador
Manuel Cruz Vivas, egresado de la ENAT e integrante de la compañía Quesillo Teatro, compartió que su profesión le permite conectarse con las personas sin importar si se presenta en la calle o en un escenario, ya que siempre se produce un momento mágico entre actor y espectador.
El público que asistió a la celebración del Día Mundial de Teatro tuvo la oportunidad de ver la obra para niños ¿Duermen los peces?, que se presentó en el teatro Salvador Novo.
La propuesta de Jens Raschke, interpretada por la actriz Adriana Resendiz, aborda el tema de la muerte y cómo una niña de 10 años vive la pérdida de su hermano Emilio.
Los niños que acudieron acompañados por sus padres también se divirtieron con la obra La máquina de Esquilo, con la compañía La Rebelión de Hefesto. La pieza, que se escenificó en la Plaza de la Música, giró en torno al teatro de Esquilo y sus tragedias.
Entre la programación en las áreas verdes del Cenart se incluyó la obra Paraíso pirata, proyecto de Alejandro Cervantes, que invita a los niños a vivir en libertad y a realizar sus sueños, como los piratas.
La directora de la ENAT, Gabriela Pérez, explicó que en la programación además de los espectáculos para niños, jóvenes y adultos se incluyeron actividades académicas como talleres y clases para fortalecer la educación de la comunidad.
El Día Mundial del Teatro en la ENAT se ha caracterizado por la participación de los jóvenes; este es un espacio muy importante para ellos, porque es la celebración de lo que saben hacer: teatro.
Como parte de las actividades también se presentaron en el teatro Salvador Novo las obras Cosas perdidas, con el grupo Teatro al Vacío; Mene, de la Caja Teatro; La gente, con la compañía Carretera 45, y Ricardo II, de William Shakespeare, con traducción y dramaturgia de Lisa Carrión.