Para la Asamblea General Politécnica (AGP) hay grupos que pretenden controlar la Comisión Organizadora del Congreso Nacional Politécnico (Cocnp) y hacer de ella una vía para buscar espacios de poder en el IPN.

Este martes la AGP formalizó su decisión de salir de la Cocnp durante una reunión con el director general del Instituto Politécnico Nacional, Enrique Fernández Fassnacht, quien también retiró a sus representantes de esa comisión.

El movimiento se da luego de seis meses de protestas en la comisión contra la AGP y de decisiones que ésta tomó junto con el director general para normar los trabajos de la Cocnp.

La esperanza del directivo –quien propuso dicho retiro– y de la AGP es que sin ellos en la comisión los delegados empezarán a trabajar en el congreso, que está detenido.

En entrevista, dos representantes de la AGP –organismo que coordinó las movilizaciones estudiantiles en 2014, las cuales concluyeron con los acuerdos que harán posible el congreso– identifican a los grupos que han intentado detener los trabajos de organización del congreso con protestas: una parte de la sección 11 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y miembros del Sindicato de Trabajadores del IPN.

Afortunadamente esos grupos no son mayoría en la comisión, pero son los que han tomado el micrófono, asegura Donovan Garrido, estudiante de posgrado de la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura de Zacatenco.

Al retirarnos les quitamos el pretexto para detener las labores de la comisión y estamos apostando por que la organización del congreso quede en manos de la comunidad politécnica, añade Omar López Chávez, del Centro de Investigaciones Económicas, Administrativas y Sociales.

Los retrasos en los trabajos de la Cocnp –instalada el 4 de julio de 2016 y que ha celebrado cuatro reuniones en las que no ha empezado a organizar el congreso– están amenazando la celebración del CNP, dicen los representantes de la AGP, que en ello coinciden con el director general del IPN, quien la semana pasada dijo que veía en serio riesgo la realización del congreso.

Estamos seguros de que, con nuestra salida, los trabajos de la comisión deben fluir, expresa Garrido.

La salida, dicen ambos estudiantes, no es una claudicación ante las protestas de los grupos que mencionan. Es nuestra manera de absorber el conflicto, de buscar detenerlo y de hacer posible que el congreso se lleve a cabo, sostiene López Chávez.

En la reunión que sostuvieron ayer con Fernández Fassnacht en la dirección general del Poli, los estudiantes y el directivo –que según los acuerdos de 2014 de la AGP y el gobierno federal son los encargados de decidir la conformación de la comisión organizadora– firmaron un documento en el que formalizaron su retiro de la comisión. En la práctica eso será una especie de autonomía de decisión para la Cocnp, integrada por maestros, estudiantes y trabajadores escogidos en escuelas y centros de investigación del instituto.