Juez panameña pide detener a dos hijos de Ricardo Martinelli
Martes 14 de febrero de 2017, p. 19
Lima.
La aparición de un nuevo testigo protegido parece agravar la situación de la esposa del ex presidente peruano Ollanta Humala, Nadine Heredia, quien supuestamente maniobró para que se concediera una obra a la constructora brasileña Odebrecht. En Panamá una fiscal pidió una alerta internacional para detener a dos hijos del ex mandatario Ricardo Martinelli, señalados en el escándalo de sobornos del gigante brasileño de la construcción.
La fiscal anticorrupción Tania Sterling solicitó la notificación roja
contra Ricardo Alberto, Luis Enrique Martinelli y una abogada local el primero de febrero, pero fue ayer cuando la noticia se dio a conocer a la prensa. El mismo día, Associated Press obtuvo una copia de la escueta petición de la fiscal.
Los hijos del ex gobernante, cuyo paradero se desconoce, son acusados de ser los presuntos destinatarios de depósitos por 22 millones de dólares ligados a los sobornos entregados por Odebrecht para hacerse de grandes contratos públicos en el país. Según el testigo, citado por el programa de televisión Cuarto poder, Heredia, quien tenía gran influencia en el gobierno de Humala (2011-2016), aprovechó eso para colocar de ministro de Energía a Eleodoro Mayorga en 2014, a pesar de que dos años antes había sido asesor de la compañía brasileña.
En tanto, el gobierno de Perú parece convencido de que el ex presidente Alejandro Toledo se encuentra aún en Estados Unidos, donde tiene residencia, y apostará por la deportación para que regrese pronto a Lima a enfrentar cargos por presunta corrupción. El anuncio fue realizado por el presidente del Consejo de Ministros, Fernando Zavala, quien afirmó que en las leyes de migración estadunidenses hay elementos que permiten la deportación de Toledo a pesar de su condición de residente.
Cinco días después de que un juez peruano le dictó prisión preventiva de 18 meses por presuntamente recibir un soborno de 20 millones de dólares de Odebrecht a cambio de la asignación de proyectos de obra pública, el paradero de Toledo es un misterio. Reportes señalan que está en San Francisco.
La deportación es el mecanismo más adecuado para que Estados Unidos devuelva a Toledo a su país de origen, donde es acusado de cometer delitos de lavado y tráfico de influencias, afirmó ayer el primer ministro de Perú, Fernando Zavala.