En Sinaloa se encuentran en esa situación más de la mitad de los agentes
Este año se entregarán $5 mil millones a 300 municipios prioritarios en cuestiones de seguridad
Domingo 5 de febrero de 2017, p. 11
El porcentaje de policías locales reprobados en el control de confianza subió tres puntos de 2015 a 2016, al pasar de 9.27 a 12 por ciento, como promedio nacional. Sinaloa es el caso más severo, con poco más de la mitad de su plantilla de agentes municipales reprobada.
La problemática a escala nacional no ha disminuido, pese a los millonarios recursos destinados para ello en los tres niveles de gobierno.
Las corporaciones conservan en calidad de reprobado a un elevado porcentaje de su nómina de seguridad pública local.
No existe, sin embargo, un plan federal, estatal o municipal para la depuración efectiva (y eventual bolsa presupuestal para liquidaciones) de los elementos incompetentes para realizar su importante labor, definido así por aspectos sicológicos, físicos, operativos e incluso aquellos de quienes se presume alto nivel de adicciones o vínculos con el crimen.
Datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), de la Secretaría de Gobernación, indican que en diciembre pasado 12 por ciento de los 128 mil mandos y policías a quienes se aplicaron exámenes de control de confianza no fueron aprobados.
Aunque este universo de no acreditados (15 mil 573 elementos de las secretarías de seguridad pública u homólogas) debería estar en proceso de investigación y depuración, hasta el momento las autoridades no han informado acerca de separación o suspensión y tampoco se sabe cuántos permanecen en activo.
En 2015, en el recuento de estatales y municipales, de los elementos sometidos a exámenes de este tipo 9.27 resultaron no aprobados. En ese lapso estaban a la cabeza, con más policías y mandos con notas negativas: Nayarit, Sinaloa, Baja California Sur, Sonora, Guerrero, Michoacán, Veracruz y San Luis Potosí.
Del lado contrario, con un mínimo porcentaje de reprobados, están Campeche, Coahuila, Guanajuato, Colima, Tamaulipas y estado de México.
Los datos oficiales de este seguimiento en las evaluaciones a policías son difundidos –y analizados– periódicamente por una organización civil (Causa en Común).
Las entidades con mayor porcentaje de uniformados no aprobados en el más reciente corte estadístico de diciembre pasado son Sinaloa, con 52.81 por ciento de su fuerza policial municipal reprobada, esto es, 2 mil 513 elementos.
Le sigue Nayarit, también con un alto nivel no satisfactorio en 42 por ciento de sus policías.
En tercer sitio aparece Baja California Sur, con 41.74 por ciento; Guerrero, 32.14, y Sonora, 24.51 por ciento.
Salvo el caso de Nayarit, el resto de las entidades con altos niveles de reprobados son también donde en el último trienio se han elevado sus niveles de delitos de alto impacto, como homicidios dolosos, vinculados a actividades de grupos delictivos.
La situación en esta materia no mejora pese a los recursos de los tres niveles de gobierno enfocados para la depuración.
A escala federal este año el SNSP entregará 5 mil millones de pesos, en conjunto, a los 300 municipios prioritarios en materia de seguridad y justicia.
La lista de los principales focos de atención, para la canalización de este subsidio, no coincide con aquellas alcaldías con más alto nivel de policías reprobados.
En el lado opuesto, entidades con menos policías municipales reprobados y que siguen en activo
, subraya Causa en Común, son Campeche (0.29 por ciento de reprobados), Colima (1.68 por ciento), estado de México (2.03, aunque ese nivel significa, en la entidad más poblada del país, 449 uniformados), Puebla (2.21) y Guanajuato (2.24 por ciento).
También hay rezagos en la renovación de los certificados de confianza de quienes actualmente poseen un documento de ese tipo.
Aquí, las instituciones de seguridad pública con más rezago son Yucatán, estado de México, Jalisco, Chihuahua, Michoacán y Morelos.
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, dijo esta semana que habrá un plan para el retiro a corto plazo de las fuerzas federales, de estados y municipios, por lo que las instituciones locales deberán acelerar sus planes de fortalecimiento.