Marisa fue una luchadora
: Rousseff
Viernes 3 de febrero de 2017, p. 32
Sao Paulo.
La esposa del ex presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, Marisa Leticia Rocco, falleció este jueves a los 66 años en Sao Paulo días después de sufrir un derrame cerebral, lo que deja al ex mandatario sin su compañera de más de 40 años y en medio de una investigación relacionada con la Operación Lavado Rápido, en la cual estaba implicada su pareja.
Rocco fue declarada con muerte cerebral en el hospital Sirio Libanés, donde fue internada de urgencia el 24 de enero tras sufrir un derrame por la rotura de un aneurisma. El centro informó que los médicos diagnosticaron ausencia de flujo cerebral
y que la familia autorizó el inicio de los procedimientos para la donación de órganos
.
La cuenta oficial en Facebook del ex presidente izquierdista (2003-2010) publicó un mensaje de agradecimiento y cambió su foto de perfil por una imagen del matrimonio sonriente y abrazado. Fue el segundo matrimonio para ambos; se conocieron siendo viudos y se casaron en 1974; tuvieron tres hijos.
En la Cámara de Diputados en Brasilia los legisladores guardaron un minuto de silencio, mientras miembros del Partido de los Trabajadores (PT) acudieron al hospital para acompañar a la familia.
Una de las visitas más emotivas fue la del ex presidente Fernando Henrique Cardoso, predecesor de Lula en el cargo y su rival político durante años, con el que se fundió en un abrazo.
La ex mandataria Dilma Rouseff indicó que en los últimos meses ella y el presidente Lula fueron víctimas de persecuciones y experimentaron grandes injusticias. Imagino que el dolor de Lula ahora es insoportable... Estamos juntos, presidente Lula, ahora y siempre
.
La destituida ex presidenta y sucesora y de Lula definió a Marisa Leticia Rocco como una luchadora que conquistó espacio y tuvo un importante papel político
, en un mensaje en las redes sociales.
Rocco estaba acusada, igual que su esposo, de corrupción pasiva y lavado de dinero. La justicia acusa que la pareja recibió un departamento en el litoral de Sao Paulo a cambio de un trato favorable para una compañía en sus negocios con la petrolera estatal Petrobras.
En este contexto, Joao Santana, ex jefe de la campaña de Rousseff y Lula, fue condenado a ocho años y cuatro meses de cárcel acusado de lavado de dinero.
El juez Sergio Moro –que dirige el caso Petrobras– también condenó a prisión a otras cinco personas, entre ellas la esposa de Santana, Mónica Moura, a la misma pena, y a Joao Vaccari, ex tesorero del PT.
La condena emitida este jueves se refiere a los depósitos realizados por el representante de la empresa naval Keppel Fels a una cuenta de Santana y su esposa en Suiza que no había sido declarada a Hacienda.
En tanto, la Corte Suprema de Brasil designó al magistrado Edson Fachin nuevo juez de la Operación Lavado Rápido en remplazo de Teori Zavascki, fallecido el mes pasado en un accidente aéreo en Río de Janeiro.
