La compleja situación económica nacional impacta de manera negativa en el sector juvenil, tanto en esta ciudad como en el resto del país, y sus primeras consecuencias son la deserción escolar y el desempleo, aseguró Carlos Nava Pérez, director del Fideicomiso de Educación Garantizada (Fidegar), del gobierno capitalino, quien consideró fundamental reforzar las políticas públicas para mantener a los jóvenes en las escuelas, lo que ayudaría a garantizarles un mejor futuro.

En entrevista detalló que una de las señales de que ese sector de la población está sufriendo por el deterioro económico es que en los últimos años se han incrementado las solicitudes de becas que otorga este organismo.

Precisó que de un periodo escolar a otro (2014-2015 a 2015-2016) se incrementaron en más de 10 mil las peticiones de esos estímulos económicos, y las autoridades locales han hecho el esfuerzo para poder atender a un mayor número de adolescentes.

Fidegar es un organismo público que depende de la Secretaría de Educación de la Ciudad de Méxicoñ cuenta con cuatro programas, Prepa Sí, Niños Talento, Educación Garantizada y Va Seguro. Para este año su presupuesto es superior a mil 900 millones de pesos, de los cuales mil 300 millones se destinan a financiar las becas que se entrega a alumnos de nivel bachillerato, sean del Instituto Politécnico Nacional, Colegio de Bachilleres o de las universidades Nacional Autónoma de México, Autónoma de la Ciudad de México o Autónoma Metropolitana, entre otras.

Carlos Nava Pérez, director del Fideicomiso de Educación Garantizada, consideró fundamental reforzar las políticas públicas para mantener a los jóvenes en las escuelasFoto La Jornada

La preocupación principal es que los jóvenes estén en las escuelas, no en las calles, y el compromiso que tenemos es que ningún joven se quede sin estudiar, y los programas que tenemos van en esa dirección, añadió Nava Pérez, quien puntualizó que Prepa Sí tuvo una demanda de becas por 260 mil estudiantes, de los cuales sólo los que viven en esta capital y están en una escuela pública tienen acceso a este beneficio, que son cerca de 215 mil jóvenes.

Agregó que esa cifra ha venido creciendo año con año a causa de dos factores: primero, que se han logrado abatir en esta ciudad los niveles de deserción en secundaria, y que este sector de la población está resintiendo la difícil situación económica nacional.

“El 80 por ciento de las familias de nuestros beneficiarios –dijo– ganan menos de 10 mil pesos, entonces, en la medida en que la familia se va viendo impactada por la situación económica, buscan alternativas para poder seguir apoyando la educación de los hijos, y es ahí donde el Fidegar ha jugado un papel fundamental”.