El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Luis Videgaray, aseguró ayer que la extradición de Joaquín El Chapo Guzmán a Estados Unidos no respondió a un calendario político y mucho menos a una nueva administración en ese país.

Se efectuó en cuanto los tiempos judiciales lo permitieron, explicó, al recordar que desde mayo del año pasado el gobierno anunció su intención de enviar al capo al país vecino.

Por otra parte, dio a conocer que la mexicana detenida en España por presuntas actividades terroristas se llama Ana Marilú Reyna Castillo, y en caso de confirmarse que permanecerá en prisión se le proveerá asistencia consular.

En conferencia de prensa en la sede de la cancillería, Videgaray explicó que la sección consular ya entró en contacto con las autoridades españolas y se encuentran a la espera de que se defina la situación jurídica de la connacional. Dijo tener información de que la situación jurídica de la regiomontana se confirmaría ayer mismo.

Por lo que hace a Guzmán Loera, el canciller resaltó que desde su recaptura, en enero de 2016, el presidente Enrique Peña Nieto anunció que se iniciaría el proceso de extradición, el cual se concretó con los acuerdos del 20 de mayo.

Lo que siguió después fue un proceso de carácter judicial en el que Guzmán interpuso amparos contra el envío a Estados Unidos, los cuales se le negaron. La última negativa fue el 19 de enero. En ese momento, la SRE tenía la obligación de ejecutar la orden de extradición, subrayó.