La Paz.

El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció este lunes una profunda reforma ministerial que dejó fuera a viejos colaboradores como el canciller David Choquehuanca, y a su principal operador político, Juan Ramón Quintana.

Choquehuanca, histórico canciller desde los inicios del gobierno de Morales, en 2006, se aparta del cargo y es remplazado por el abogado e investigador aymara Fernando Huanacuni. Por su parte, Quintana es sustituido por el ex parlamentario y también abogado René Martínez.

Personalmente volveré a trabajar con las bases, volveré a donde ha nacido nuestro instrumento político, para fortalecer aún más tu liderazgo y cuidar la unidad de nuestra gran familia, dijo Choquehuanca en su despedida ante Morales, en el gubernamental Palacio Quemado.

Se trata del canciller que más tiempo ha permanecido en el cargo en la historia de Bolivia y que ha tenido un papel clave en la relación bilateral con Chile, país al que llevó a la Corte Internacional de Justicia de La Haya para exigirle negociar la recuperación de una salida al mar que perdió tras una guerra a finales del siglo XIX. Se trata de un tema que congrega a las masas y que aún está abierto en el tribunal.

Morales, quien comienza su año 12 en el poder, nombró a 10 nuevos ministros y ratificó a otros 10, eliminó las carteras de Transparencia y de Autonomías –que se integrarán a otros ministerios– y creó la de Energía, que estará a cargo de Rafael Alarcón, ex gerente de la Empresa Nacional de Electricidad.

El único ministro que permanece desde que asumió el poder en 2006 es Luis Arce, de Economía.

Hay que seguir trabajando, remarcó en su discurso Morales –primer presidente indígena y de izquierda–, quien aseguró que su gabinete trabajará para eliminar problemas como la microcorrupción en los ministerios, entre trabajadores de menor rango.

El gobernante anunció el pasado sábado que iba a designar un gabinete político enfocado en la Agenda 2025, considerada la mayor estrategia estatal de este país andino-amazónico.

Morales perdió en febrero del año pasado un referendo para modificar la Constitución y presentarse a un cuarto mandato para (2020-2025), pero actualmente sus partidarios buscan un camino para lograrlo.

En coincidencia con la realización del referendo Evo Morales fue afectado por un escándalo mediático que involucró a la firma china CAMC y a Gabriela Zapata, ex pareja del mandatario, quien alegaba tener un hijo con el gobernante, aunque finalmente se determinó que el menor no existe.

Tras perder el referendo el presidente argumentó entonces que fue derrotado con la mentira de la derecha y sugirió al tribunal electoral anular el resultado.

El oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS) estudia mecanismos constitucionales para habilitar otra candidatura, mientras en todos estos años de gobierno de Morales, la oposición se ha mostrado débil y poco cohesionada como para representar una fuerza alternativa.

Morales, que ha ganado en sus tres elecciones con sólida mayoría, tiene actualmente 58 por ciento de popularidad, aunque 63 por ciento rechaza que se postule por cuarta vez a la presidencia, según una encuesta.