Mundo
Ver día anteriorViernes 23 de diciembre de 2016Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
Iglesia católica chilena dice no avalar la impunidad
Foto
La Iglesia católica no favorece la impunidad, afirmó ayer el secretario de la Conferencia Episcopal, Fernando Ramos, en respuesta a víctimas de la dictadura de Augusto Pinochet que ocuparon ayer la Catedral de Santiago y se encadenaron a las bancas del templo (en la imagen) en protesta por un presunto apoyo de la jerarquía católica a la liberación de represores y violadores de los derechos humanos ya ancianos o con enfermedades terminales o mentales, que presionan para salir en libertadFoto Ap
 
Periódico La Jornada
Viernes 23 de diciembre de 2016, p. 22

Santiago

La Iglesia católica afirmó este jueves que no favorece la impunidad de los violadores a los derechos humanos bajo la dictadura militar del general Augusto Pinochet (1973-1990), quienes presionan por obtener beneficios carcelarios para salir en libertad, declaró este jueves el secretario de la Conferencia Episcopal, Fernando Ramos.

Ramos respondió así a víctimas de la dictadura pinochetista que ocuparon la Catedral de Santiago y se encadenaron a las bancas del templo en protesta por lo que pensaron era un apoyo de la Iglesia católica a la liberación de violadores de los derechos humanos ya ancianos o con enfermedades terminales o mentales.

Nosotros como Iglesia no favorecemos la impunidad, menos con los graves delitos de lesa humanidad, aseguró Ramos.

La ocupación del templo fue también en rechazo a una misa ecuménica prevista para este viernes dentro del penal de Punta Peuco, 40 kilómetros al norte de Santiago, en la que se anunció que ocho criminales de lesa humanidad pedirán perdón por sus acciones criminales bajo la dictadura .

Ramos aclaró a las mujeres encadenadas que lo del viernes es un acto privado a la que algunos reos invitaron a pastores católicos y no católicos.

Quiero repetir que nosotros como Iglesia no favorecemos la impunidad, menos con los graves delitos de lesa humanidad, recalcó.

El nuevo presidente de la Conferencia Episcopal, Santiago Silva, declaró el miércoles que lo que buscan los reos de la cárcel de Punta Peuco, es que tengamos un poco más de humanidad, y es también lo que propone la Iglesia, respecto a los presos viejos y enfermos. Adujo que varios están con demencia senil.

Rosa Silva, encadenada junto a su hermana en la Catedral, explicó ingresó al templo para decirle a este país que no queremos que nadie perdone en nuestro nombre a los asesinos que torturaron, desaparecieron y callaron...estamos aquí con respeto.

Añadió que se trata de un gesto de molestia, de dolor porque el mundo ecuménico pretende reírse de nosotros.

Silva es hija de Mario Silva Hiriarte ejecutado sumariamente por una comitiva militar poco después del golpe del general Augusto Pinochet. Nos vamos a quedar acá hasta que tengamos un pronunciamiento (de la Iglesia), enfatizó, mientras una treintena de personas apoyaban con gritos y pancartas sus demandas.

Cecilia Heyder, encadenada detrás de Silva, atribuyó su protesta a que no puede haber impunidad para ningún violador a los derechos humanos y en memoria de su padre, el capitán de ejército Osvaldo Heyder, quien se negó a hacer desaparecerá la gente y por eso lo mataron.

Prisioneros sobrevivientes a las torturas testificaron del buen comportamiento de Heyder con los presos políticos.

En Punta Peuco hay unos 120 condenados por violaciones a los derechos humanos, la mayoría son ex miembros de las fuerzas armadas y ex agentes de la policía represiva de la dictadura. Cumplen sentencias por asesinatos, torturas, violaciones sexuales a hombres y mujeres, desapariciones, y ejecuciones ilegales.

La dictadura dejó 40 mil 18 víctimas -incluidos 3 mil 95 asesinados- de los cuales más de un millar siguen desaparecidos.

Hay más de un millar de juicios abiertos contra violadores de los derechos humanos quienes, debido a un denunciado pacto de silencio no han colaborado para el esclarecimiento de los hechos y solamente han podido ser identificados los restos óseos de 167 víctimas del régimen castrense.