Buenos Aires.

Ante manifestantes y periodistas la canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, fue agredida y golpeada en el antebrazo por fuerzas de seguridad cuando intentaba entrar al Palacio San Martín, sede de la cancillería, donde se celebraba la reunión de ministros de Relaciones Exteriores del Mercado Común del Sur (Mercosur), y lo mismo sucedió con su colega de Bolivia, David Choquehuanca, quien la acompañaba.

Hubo empujones y malos tratos a las delegaciones de ambos países, algunos ministros entre ellos, en un hecho inédito en la historia diplomática, lo que originó mensajes de repudio de diversos sectores políticos, sindicales y sociales y demandas para que el gobierno del presidente argentino Mauricio Macri ofrezca disculpas a los agredidos. También protestó el canciller Choquehuanca.

Rodríguez llegó la noche del martes a esta capital para asistir a la reunión de cancilleres del Mercosur celebrada este miércoles, para pedir explicaciones a sus colegas por las medidas tomadas contra Venezuela, cuando el pasado 2 de diciembre fue suspendida como miembro pleno del Mercosur porque, de acuerdo con los cuatro socios originales del bloque (Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay), debía completar una serie de normas, que se cumplieron, pero además no está prevista la suspensión en este caso en los protocolos del organismo.

Antes se había decidido desconocer que al gobierno de Nicolás Maduro le correspondía la presidencia pro témpore (que se rota cada seis meses) por una decisión con argumentos absolutamente falsos, en violación de las reglas del organismo de integración.

La mañana de este miércoles las delegaciones venezolana y boliviana entraron de manera forzada a un edificio de la cancillería frente al Palacio de San Martín, donde después de varias negociaciones fueron recibidas por la canciller argentina, Susana Malcorra, con quien se confrontaron durante una hora sin lograr ningún resultado favorable al diálogo.

Insistieron en concurrir al Palacio San Martín, donde transcurría la reunión con los miembros del bloque, y ahí ocurrieron los incidentes con los policías ante centenares de manifestantes que reclamaban el golpe de Estado contra el Mercosur.

Ante el estupor, Rodríguez y Choquehuanca decidieron avanzar hacia el recinto, donde Malcorra se reunió con sus pares Eladio Loizaga (Paraguay); José Serra (Brasil) y Rodolfo Nin Novoa (Uruguay), para abordar la agenda del próximo semestre, dando prioridad a temas como las negociaciones para concretar un acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea.

Cuando finalmente los cancilleres de Venezuela y Bolivia llegaron al salón, sus colegas lo habían abandonado de manera apresurada creando una situación difícil e inédita.

En rueda de prensa posterior Malcorra indicó que, efectivamente, Venezuela no había sido invitada a la cita por haber sido cesada en el bloque, y agregó que el diálogo con Rodríguez había sido franco a partir de las enormes diferencias y que este jueves hay una reunión inicial para avanzar en el diálogo directo, para explicarle a la canciller de Venezuela las decisiones que se toman en el Mercosur, y Argentina asumió la presidencia pro témpore en medio del escándalo.

La canciller Rodríguez denunció lo sucedido ante un grupo de diputados del Frente para la Victoria y de otros partidos que apoyan a Venezuela y que la invitaron a una reunión de trabajo en el Congreso. Desde allí la trasladaron para atención médica a una clínica, donde se le inmovilizó el brazo.