Los gobiernos entrantes de Oaxaca y Veracruz reciben dos estados en los que la violencia contra las mujeres ha ido en aumento. En la primera entidad se duplicó el número de feminicidios; la otra, hundida en una crisis financiera, debe asignar recursos de manera inmediata para la recién declarada alerta de violencia de género.

En el sexenio de Gabino Cué (2010-2016) hubo 572 feminicidios. Con su antecesor, Ulises Ruiz (2004-2010), se cometieron 286, informó la feminista oaxaqueña Yésica Sánchez Maya. En tanto, 452 veracruzanas desaparecieron en 2015, de acuerdo con la activista Araceli González Saavedra.

En Oaxaca estamos en un nivel catastrófico, sostuvo en entrevista Yésica Sánchez, de la organización Consorcio para el Diálogo y la Equidad. La administración del nuevo gobernador, Alejandro Murat, deberá lidiar con el aumento de feminicidios y con torturas más crueles contra las mujeres, acoso sexual, violencia laboral e intrafamiliar y violaciones, agregó.

Las agresiones crecieron debido a la impunidad, afirmó, pues no se libraban órdenes de aprehensión y cuando se hacía tardaban en ejecutarlas, dando tiempo a los agresores para pedir un amparo judicial o huir.

Las autoridades estatales tampoco protegieron a las defensoras de derechos y se arremetió contra periodistas, pues hace unos meses “desde el Congreso local se difundió una lista de reporteras chayoteras (que reciben sobornos). La mayoría son reconocidas por su trabajo honesto”, aclaró.

En Veracruz, el pasado 24 de noviembre el gobierno federal declaró una alerta de violencia de género, a siete días de que asumiera la gubernatura Miguel Ángel Yunes. Ese mecanismo de emergencia llegó tarde, consideró en entrevista por separado Araceli González, de Equifonía.

No tenemos una expectativa favorable del nuevo gobierno. Ha habido cambios en dependencias, en la administración estatal, pero eso no ha traído mejor vida para las mujeres.

Esta semana vence el plazo para que Yunes designe el presupuesto para atender la alerta. Sin embargo, con las deudas que dejó Javier Duarte el dinero no llegará pronto, pronosticó.