Lo deslizó como una posibilidad, pero hoy dio el paso decisivo. El medallista olímpico en Río 2016, Misael Rodríguez, anunció que incursiona en el boxeo profesional al firmar con la empresa Ringstar y prevé su debut en marzo de 2017.

El pugilista saltó a la fama al conquistar la primera presea de la delegación mexicana en los juegos de Brasil, medalla que cortó además una sequía de 16 años para el boxeo olímpico.

Analicé todas las opciones, sin presiones, y decidí que era lo mejor para cumplir mi sueño de ser campeón del mundo, señaló.

Al final, si tú le preguntas a un peleador qué es lo que verdaderamente quiere, sin lugar a dudas te responderá que quiere ser campeón del mundo. Para eso nos metimos en esto.

Después de ganar la medalla, Rodríguez tomó un receso para analizar su futuro.

Existía la posibilidad de permanecer como boxeador amateur, pero el triunfo olímpico también le presentó ofertas interesantes. Admitió que el logro hizo que le llegaran ofertas de promotores interesados en firmarlo.

El primero que dio el paso al profesionalismo de los peleadores tricolores que compitieron en Brasil fue Joselito Velázquez, quien debutará en poco más de una semana, firmado por la promotora japonesa Teiken.

No fue la seducción del dinero –aclara–, aunque sabe que puede fluir en cantidades considerables, lo que lo llevó a decidirse por el boxeo de paga. Tampoco la fama, pues asegura que la medalla que ganó en Río lo hizo un personaje público.

La fama la tomé con tranquilidad, recuerdo que antes de ganar la medalla nadie me conocía, pero no fue por eso. Lo que tengo es hambre de convertirme en campeón del mundo, agregó el boxeador, descrito por Richard Schaefer, dueño de la empresa con la que ha firmado, como una promesa joven con potencial de superestrella.