En Lima, el mandatario se dice creyente y promotor de la apertura comercial
Lunes 21 de noviembre de 2016, p. 5
Lima.
En un ambiente generalizado de incertidumbre sobre cómo actuará la administración de Donald Trump frente a los acuerdos de libre comercio, entre ellos el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y el Acuerdo Transpacífico (ATP), el presidente Enrique Peña Nieto vino a la cumbre del Foro de Cooperación Asia-Pacífico (APEC) para ratificar a México como un firme creyente y promotor de la apertura comercial.
Por lo mismo, y frente a las que definió como ‘‘voces que culpan a la globalización y al libre comercio de la desigualdad y la falta de crecimiento’’, pidió fortalecer la integración regional y llamó a la APEC a ser el motor del área de libre comercio de la región Asia-Pacífico.
Aunque el mandatario admitió la existencia de ‘‘una compleja coyuntura caracterizada por un moderado crecimiento y por el descontento y la desconfianza hacia el libre comercio, toda vez que sus beneficios no se han extendido a la base de la sociedad’’, pidió democratizar los beneficios del comercio.
Asimismo y cuando el acuerdo comercial en vigor desde hace 22 años vive uno de los momentos de mayor incertidumbre ante la amenaza del republicano Trump de dejarlo sin efecto, el mandatario hizo explícita aquí la postura de México: modernizar, no renegociar.
Durante el único día dedicado por el presidente Peña Nieto a asistir a las actividades colaterales y centrales de la cumbre anual de la APEC, pues el mismo sábado regresó a México, sobresalió una reunión bilateral con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.
Aunque el comunicado de Los Pinos dando cuenta de ese encuentro nunca hace explícita referencia al TLCAN, ratificaron su condición de ‘‘socios, amigos y aliados’’. Además, ‘‘expresaron su disposición para continuar trabajando juntos’’.
Lo anterior fue expuesto por la Presidencia de México como resultado de la reunión bilateral entre el presidente Enrique Peña Nieto y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, esta tarde durante los trabajos de la cumbre del Foro de Cooperación Asia-Pacífico (APEC).
El comunicado indica que ambos mandatarios pusieron énfasis en la necesidad de colaborar de manera ‘‘continua, cercana y efectiva para seguir promoviendo a América del Norte como una región competitiva y próspera’’. Y significativamente se consigna como producto de la ‘‘colaboración cercana’’ de los dos países la eliminación de la visa para visitantes mexicanos a partir del próximo primero de diciembre’’.
Primero en un artículo en el diario peruano La República, y más tarde en sendos foros con empresarios y con el Consejo Asesor Económico (ABAC) de ese foro, el mandatario reiteró su llamado: ‘‘No nos dejemos confundir por sentimientos proteccionistas que empiezan a crecer en diversas partes del mundo. La apertura (comercial) ha reportado más beneficios que perjuicios’’.
Y cuando México fue visto aquí con especial interés por el resto de las economías de la APEC, precisamente por las amenazas que se ciernen en torno al TLCAN y al probable abandono de Trump a continuar el proceso de aprobación del ATP, el presidente Peña no movió un ápice la posición de defensa a ultranza de ese tipo de acuerdos de intercambio: México ‘‘quiere la apertura y el libre comercio, de los que ha sido importante promotor’’.
Hoy se aprecia en el mundo un sentimiento proteccionista ‘‘a partir de lo que algunos suponen ha sido un impacto negativo en las sociedades, cuando es justamente todo lo contrario: el libre comercio ha deparado mayor desarrollo, crecimiento e inclusión social’’, fue en todos los escenarios el discurso del mandatario mexicano.
Y fue además el mismo mensaje transmitido a lo largo del día y en conversaciones informales a líderes de APEC con los que conversó, entre ellos Barack Obama, de Estados Unidos; Xi Jinping, de China; el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, e incluso con el fundador de Facebook, Mar Zuckerberg, según reportó la Presidencia.