Investigadores universitarios y senadores del PAN coincidieron en que la debilidad de las finanzas nacionales complica al gobierno federal la estrategia para detener la depreciación del peso frente al dólar.

El presidente del PRI, Enrique Ochoa Reza, expresó el respaldo pleno de ese partido al presidente Enrique Peña Nieto ante el efecto provocado en la caída de nuestra moneda nacional por el triunfo de Donald Trump en Estados Unidos y consideró que la decisión de la Cámara de Diputados de aprobar el Presupuesto de Egresos de la Federación fue responsable.

Los mexicanos debemos actuar unidos y de manera responsable. A todos corresponde contribuir a la fortaleza del país, resaltó.

Entrevistado después de una ceremonia con egresados de la escuela de cuadros del sector campesino, indicó que desde el tricolor existe el apoyo decidido al Presidente en el ejercicio diplomático para construir las relaciones bilaterales con la nueva administración de Estados Unidos.

En entrevista aparte, el senador del PAN Héctor Larios sostuvo que a las autoridades hacendarias y del Banco de México no les queda otra opción que lo que están haciendo, porque las finanzas del país se encuentran tan mal, que si oferta dólares baratos, se les van a acabar y va a seguir la vulnerabilidad económica.

Explicó que la incertidumbre sobre lo que hará Trump en materia de comercio con México ha hecho que los extranjeros que tienen Cetes los estén convirtiendo en dólares. Hay mucha demanda y poca oferta y por ello está subiendo el precio de la moneda estadunidense. A este panorama se agrega la propia debilidad de las finanzas nacionales y el endeudamiento excesivo, subrayó.

Por su parte, César Salazar López, del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, dijo que la economía está a expensas de lo que pasa en el mercado internacional, ya que pese a que el gobierno federal hace lo que debe hacer, al recortar el gasto, perseguir la inflación, mantener la estabilidad, el peso es castigado.

Para el especialista, uno de los problemas de fondo frente a la coyuntura financiera internacional es que en México no hay un mercado interno sólido. Su opinión es compartida por Abraham Vergara, coordinador de la licenciatura en contaduría y gestión empresarial de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, quien consideró que si bien una parte de la culpa de la devaluación del peso la tiene Trump, otra parte se explica porque nuestra economía no es la más sólida.