Los Diablos Rojos del México jugarán en la liga invernal mexicana (octubre-diciembre) sólo con peloteros nacidos en el país, para aprovechar a los egresados de la Academia de la especialidad que se han preparado desde hace varios años, expuso su gerente, Othón Díaz.

Así, se adelantará el formato de la siguiente temporada, con la idea no sólo de que se vayan amoldando los peloteros, sino de ver cómo la afición recibe esta novedosa formación de la novena.

El directivo apeló a la confianza de los aficionados a este deporte para con los Diablos, sabedor de que estarán en desventaja ante otras instituciones que se han negado a trabajar sólo con peloteros nacionales.

Destacó que el principal interés de Alfredo Harp Helú, dueño de los Diablos Rojos y de Guerreros de Oaxaca –que también sólo tendrá nacidos en México–, es que los nacionales tengan la oportunidad de jugar y desarrollarse en su propio país y no se les nieguen opciones por un extranjero que ocupe ese lugar.

Tampoco se trata de criticar a los foráneos, quienes también tienen calidad, sino de dar salida al talento local para que cada vez pueda tener más posibilidades, no sólo de estar en la Liga Mexicana de Beisbol, sino emigrar a las Grandes Ligas.

El gerente explicó que Diablos Rojos tiene un convenio firmado con Padres de San Diego, de las ligas estadunidenses, adonde son enviados algunos de los nacionales que si tienen cualidades podrían enrolarse en las menores y en las mayores, mientras otros regresaran al país para terminar de formarse y destacar.

Mencionó que no es sólo un tema de desarrollo de los peloteros locales, sino de mercadotecnia, ya que a un extranjero pueden pagarle hasta 10 mil dólares mensuales, mientras a un nacional se le daban hasta 130 mil pesos de salario, pero hay instituciones que no quieren verlo así y prefieren seguir como hasta ahora.